La pequeña Chiara, superviviente de la crecida del Raganello

María Signo ROMA / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

EFE

Fue encontrada en estado de «shock» al lado de los cadáveres de sus padres, dos de los diez fallecidos

22 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La mano sucia de barro de la pequeña Chiara se aprieta contra el hombre que la ha salvado. Es la imagen de una nueva tragedia que ha sacudido a una Italia que parece no encontrar tranquilidad en un difícil verano. Esta niña de 8 años es una de las supervivientes de dos grupos de excursionistas a los que sorprendió la crecida del torrente Raganello en el Parque Nacional de Pollino, en Cosenza (región de Calabria, sur de Italia), que se ha saldado con diez fallecidos, entre ellos un niño de 14 años. Fue encontrada herida y en estado de shock muy cerca de los cadáveres de sus padres.

A Chiara la salvó Pasquale Gagliardi, médico anestesista del servicio de socorro de Calabria que iba en el primer helicóptero que acudió al lugar: «Estaba muerta de frío y temblaba. Los dos socorristas del Soccorso Alpino tenían dificultad para retenerla porque el agua la arrastraba». Cuando consiguieron sacarla del río la niña «no hablaba, solo balbuceaba. Nunca olvidaré el temblor de su mano que tocaba las nuestras mientras la izábamos a bordo». Chiara está ahora en el Policlínico Gemelli de Roma con pronóstico reservado. La foto aparece en el perfil de Facebook de Pasquale porque «desde ahora esta es la foto de mi vida, de su vida».

Las fuertes lluvias e ignorar las medidas de seguridad se convirtieron en una trampa mortal para las personas que se encontraban en el río Raganello. La crecida del torrente los cogió completamente desprevenidos. «Fue como un tsunami», relató Giacomo Zanfei, vicepresidente del servicio de rescate en montaña en Calabria. Seis mujeres y cuatro hombres fueron arrastrados por la furia de las aguas en un cañón de 13 kilómetros de largo cuyas paredes rocosas llegan a alcanzar 600 metros de altura. Formaban parte de dos grupos de excursionistas. Alguno incluso se estaba dando un baño sin el equipo y la ropa necesarios para entrar a la garganta, como el adolescente cuyo cuerpo fue encontrado en bañador. Después de horas de búsqueda, los equipos de socorro confirmaron diez fallecidos y ocho heridos, de los cuales, además de Chiara, hay otros cuatro cuyo estado es grave. La fuerza de las aguas fue tal que algunos cuerpos fueron encontrados a cinco kilómetros del cañón.

A los excursionistas se les achaca ignorar las previsiones atmosféricas. «Había alerta amarilla por el mal tiempo», señaló el jefe de Protección Civil, Angelo Borrelli. También no cumplir el reglamento del parque que prohíbe el acceso a la garganta del torrente a los menores de 10 años. Aunque el recorrido está aconsejado solo para aquellos con experiencia en estos lugares y se recomienda hacer el trayecto, con un guía, la mayoría de los excursionistas prefieren aventurarse solos, incluso haciendo rafting. El guía Emanuele Pisarra señaló que muchos de los excursionistas se aventuran por la zona sin ropa ni calzado adecuado.