Carwyn Jones: «Dejaremos la UE, pero no vamos a darle la espalda a Europa y Galicia»

Juan María Capeáns Garrido
Juan Capeáns SANTIAGO / LA VOZ

INTERNACIONAL

PACO RODRÍGUEZ

El ministro principal de Gales defiende en Santiago la autonomía galesa para alcanzar acuerdos que limiten el daño del «brexit»

28 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Carwyn Jones (Swansea, Gales, 1967) visitó Galicia por primera vez y ya ha prometido regresar con su esposa con una agenda oficial menos intensa. Integrado en el Partido Laborista, es el ministro principal de Gales desde el 2009, así que lleva el mismo tiempo en el poder que Alberto Núñez Feijoo, al que devolvió la visita que este cursó a Cardiff en noviembre pasado. Jones firmó un memorando con el presidente de la Xunta para dejar constancia de que la salida de la Unión Europea del Reino Unido no significa que Gales y Galicia -dos territorios atlánticos, periféricos y casi gemelos en cuanto a cifras socioeconómicas- sean simples espectadoras del brexit, y por ello quieren establecer sus propios acuerdos para proteger las exportaciones y el sector marítimo-pesquero; para impulsar la sensibilidad demográfica; o para promover aproximaciones en el ámbito cultural y educativo. 

-Antes del «brexit» se habló mucho de la inmigración o del coste de permanecer en la UE. ¿Estaba informada la gente sobre las repercusiones en sectores como la pesca o la industria?

-No. La pesca para Gales es un sector pequeño, pero el de los fabricantes es muy importante para nuestra economía. Lo cierto es que la gente votó por razones que no tenían nada que ver con Europa. Muchos me confesaron que querían protestar contra el Gobierno del Reino Unido, contra la globalización o las pensiones... Había muchas razones para el voto protesta, ese fue el peligro del referendo.

-¿Están presentes en las negociaciones los intereses sectoriales o serán los flecos del divorcio?

-Las negociaciones sectoriales, cuando hay una negociación más amplia, son muy complicadas. Nosotros tenemos dos prioridades: obtener el mayor acceso posible al mercado único y permanecer en la unión aduanera. Eso resolvería parte de los problemas generados por el Gobierno británico. La gente ha votado salir de Europa, pero eso no significa que haya que hacerlo de forma perjudicial.

-¿Londres tiene una visión centralista de las negociaciones?

-Hemos tenido una larga batalla entre las diferentes instancias del Gobierno británico porque las regiones queremos saber cómo se resuelven cuestiones de competencias que estaban transferidas a la UE. Y esa batalla la hemos ganado las regiones, porque ya se ha decidido que esas competencias se van a devolver, y otras van a quedar en suspenso hasta que se llegue a un acuerdo total sobre el reparto interno de las competencias transferidas. Pero hay que tener en cuenta que el Gobierno británico sí que es centralista. El Reino Unido se identifica completamente con Inglaterra, porque nunca ha existido un sistema federal real, y por eso surge un conflicto cuando el Gobierno británico solo trata de defender los intereses ingleses.

-¿La inestabilidad que se aprecia en el Gobierno de May a cuenta del «brexit» afecta a Gales?

-Tiene un impacto negativo para todo el mundo. Estamos particularmente preocupados por ello, porque tenemos grandes empresas que están inquietas por su futuro dentro de Europa. Nos interesa que se mantenga un clima favorable para las inversiones, que no se vea al Reino Unido como un mercado distinto del mercado único. Eso puede suponer reducciones de plantillas para adaptarse solo al mercado británico. Y tenga en cuenta que el 60 % de las exportaciones de Gales se dirigen a Europa.

-¿Londres entiende y respeta acuerdos como el firmado entre Gales y Galicia?

-Tenemos la libertad para hacerlo, no tenemos que pedir permiso. Y continuaremos haciéndolo. Lo que sí que hay que entender es que dejaremos la UE, no porque yo lo quiera, pero aquí deben tener claro que no le vamos a dar la espalda a nuestros amigos de Europa y de Galicia.

-¿Qué pasaría en Gales si se repitiese ahora el referendo del 2016?

-Mucha gente no ha visto las consecuencias todavía. Si se repitiese es posible que ganase el voto para quedarse -entonces venció el brexit con un 52,5 %- pero seguirían bastante próximos. La gente aún no sabe qué pensar.