Siria afirma que los investigadores de armas químicas ya trabajan en Duma

Mikel Ayestarán JERUSALÉN / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Duma, la ciudad más importante de la región de Guta Oriental, ha estado bajo control de los opositores armados desde el 2011
Duma, la ciudad más importante de la región de Guta Oriental, ha estado bajo control de los opositores armados desde el 2011 STRINGER / AFP

Rusia anuncia el hallazgo de un laboratorio rebelde para fabricar gas sarín y cloro

18 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Diez días después del ataque armas químicas denunciado por la oposición en Duma, los inspectores de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) tuvieron acceso al lugar de los hechos, según informó este martes la agencia oficial siria, Sana. Sin embargo, no aportó más detalles, ni imágenes y la OPAQ no emitió ningún comunicado confirmando esa información.

Rusia, aliado de Bachar al Asad, anunció que ya se daba la «situación de seguridad» adecuada para que los expertos se desplazaran a un lugar que ha estado desde el 2011 bajo control de los grupos armados contrarios al régimen. La denuncia por la falta de acceso que formuló la delegación de investigadores de la OPAQ el lunes parece que tuvo efecto y las autoridades de Damasco y Moscú les permitieron iniciar una investigación cuyo objetivo es aclarar si hubo o no ataque químico, pero no señalar al culpable.

La pesquisa de lo ocurrido lleva camino de convertirse en un culebrón. Todas las partes aseguran estar en posesión de pruebas irrefutables que confirman y desmienten el uso de sustancias prohibidas y los inspectores llevaban desde el sábado metidos en un hotel a la espera de poder aclarar los hechos. Estados Unidos y Francia alertaron del riesgo de que Rusia habría aprovechado todos estos días para eliminar las pruebas de la escena del ataque, pero Moscú no solo lo niega, sino que este martes informó de que sus hombres descubrieron en Duma un laboratorio rebelde para fabricar armas químicas. Alexánder Rodionov, miembro de la unidad de protección de armas químicas de las fuerzas rusas, aseguró que sus expertos encontraron bidones de cloro y componentes para producir gas mostaza. También dicen haber encontrado «un recipiente con gas cloro similar al que mostraron los activistas» en las imágenes difundidas el 7 de abril.

Al menos 40 personas perdieron ese día la vida tras el lanzamiento de barriles bomba con sustancias prohibidas en dos puntos de Duma, tal y como denunciaron dos organizaciones de la oposición a las que respalda Estados Unidos. Siria, que tiene el apoyo de Irán y Rusia, lo negó y acusó a la oposición de hacer este montaje para provocar la intervención militar de Donald Trump, que el sábado lideró un ataque en el que junto a Francia y Reino Unido lanzaron más de cien misiles contra tres objetivos relacionados con el programa de armas químicas sirio.  

Ofensiva contra el EI

Mientras, la guerra avanza y el Ejército sirio y sus fuerzas aliadas comenzaron los preparativos para lanzar una gran operación en Yarmuk, el campo de refugiados palestinos situado muy cerca de Damasco y que está en manos del Estado Islámico (EI). Tras la victoria militar en Guta, el final del EI en Yarmuk supondría que toda la capital y sus alrededores quedarían en manos de las fuerzas leales a Al Asad.

Las fuerzas del régimen han ofrecido a los yihadistas la posibilidad de negociar y así evitar una ofensiva, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

Trump quiere que una fuerza árabe releve a sus tropas en el país en guerra

La Administración Trump quiere que una fuerza árabe releve a los 2.000 soldados estadounidenses desplegados en Siria en la lucha contra el Estado Islámico. El ministro de Exteriores saudí, Adel al Yubeir, confirmó que Riad está en conversaciones con EE.UU. sobre el eventual envío de tropas al país en guerra. El plan es que Arabia Saudí, Catar y Emiratos Árabes Unidos aporten miles de millones de dólares para reconstruir el noreste de Siria y envíen además tropas, según desveló The Wall Street Journal citando a fuentes gubernamentales. De acuerdo con el WSJ, John Bolton, el nuevo asesor de seguridad nacional, ha hablado también con el jefe de la inteligencia egipcia para conocer la disposición de El Cairo a participar.  

Trump ya esbozó la idea de una mayor contribución árabe en Siria al anunciar que quería traer las tropas a casa, hace dos semanas, y que planteó a los implicados el viernes, horas antes de lanzar, junto al Reino Unido y Francia, el ataque. La intención es que este contingente regional asuma el liderazgo de la guerra contra el EI en complicidad con las milicias kurdas, que han servido de fiel aliado de la coalición internacional. Otra labor sería impedir que la zona pase a ser controlada por fuerzas apoyadas por Irán.

El fundador de la firma militar privada Blackwater, Erik Prince, confirmó al WSJ que ha tenido contactos informales con funcionarios árabes sobre una eventual fuerza para Siria, pero que está a la espera de lo que decida Trump.   

No habrá más sanciones

Lo que parece ya descartado es una nueva ronda de sanciones a Rusia. El presidente así lo ha señalando, en un nuevo cisma con su equipo de seguridad nacional. El lunes, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Huckabee Sanders, contradijo a la embajadora de EE.UU. ante la ONU, Nikki R. Haley, que había anunciado el domingo sanciones inminentes, y señaló que aún no se había tomado una decisión.

Otro funcionario de la Casa Blanca, que habló bajo condición de anonimato a The New York Times, apuntó que Trump había decidido no seguir adelante con las sanciones, al considerarlas innecesarias porque la respuesta de Moscú al ataque aéreo contra objetivos sirios fue tan solo un «fanfarronada».

Según la fuente, Trump está molesto con Haley por dejar en entredicho su credibilidad al tener que ahora mostrar su rechazo a más sanciones. Haley es una de las voces más críticas con Rusia.