Reino Unido rechaza el borrador del acuerdo del «brexit» elaborado por Bruselas

EFE / Europa Press

INTERNACIONAL

PETER NICHOLLS | reuters

El texto plantea «una área común regulatoria» entre Irlanda del Norte y la UE, lo que la primera ministra británica considera una «amenaza» a «la integridad constitucional del Reino Unido»

28 feb 2018 . Actualizado a las 16:20 h.

Theresa May no aceptará el borrador del acuerdo del brexit elaborado por la Comisión Europea (CE) porque -dijo este jueves en el Parlamento británico- «amenaza la integridad constitucional del Reino Unido». Se refiere concretamente la primera ministra británica a la propuesta de «una área común regulatoria» entre la provincia británica de Irlanda del Norte y la Unión Europea.

El borrador publicado por Bruselas sobre el acuerdo de retirada del Reino Unido de la UE traduce en términos jurídicos los compromisos alcanzados entre las dos partes en diciembre sobre los derechos de los ciudadanos, el acuerdo financiero y también la frontera irlandesa. En esa última cuestión, propone mantener en ambas áreas una «coherencia reglamentaria», de modo que en las normas de la unión aduanera y el mercado interior permanecerían en vigor en toda la isla. «Se crea un área regulatoria común que incluye a la Unión y al Reino Unido en lo referente a Irlanda del Norte -señala el documento-. El área regulatoria común debe constituir un espacio sin fronteras internas donde el libre movimiento de bienes se garantice y la cooperación entre el norte y el sur se proteja».

Según explicó el negociador jefe de la UE para el brexit, Michel Barnier, esa opción protege «ahora o en el futuro» la cooperación entre el norte y el sur, la economía irlandesa y el acuerdo de paz del Viernes Santo, que puso fin en 1998 al conflicto norirlandés.

«Ningún primer ministro del Reino Unido podría alguna vez estar de acuerdo con eso», consideró sin embargo May en referencia a la posibilidad de que la frontera comercial quedara delineada en el mar de Irlanda. Es este uno de los asuntos más difíciles de resolver en las negociaciones sobre la salida del Reino Unido, porque un retorno a las barreras fronterizas podría poner en peligro el proceso de paz norirlandés.

El Gobierno de May ha dejado siempre claro que quiere que la frontera entre las dos Irlandas siga siendo invisible, mientras que los partidos probritánicos se niegan a que, para mantener una unión aduanera entre ambos territorios, la frontera comercial quede fijada entre la provincia y Gran Bretaña.

Periodo de transición posterior al «brexit»

Además de las cuestiones que permitieron pasar a la segunda fase de las conversaciones, el texto también hace referencia al periodo de transición posterior al brexit, que se prolongaría entre la salida efectiva en marzo del 2019 y diciembre de 2020. El borrador se debatirá con el Parlamento Europeo y los veintisiete países que permanecerán en la Unión antes de su presentación al Reino Unido, pero Barnier recalcó que su versión definitiva debería aprobarse en otoño y dejar tiempo para su ratificación en el Consejo de la UE, la Eurocámara y el Parlamento británico.

Por otro lado, el negociador de la Unión Europea aseguró que es necesario «acelerar» las negociaciones sobre la salida británica del club comunitario si se quiere concluir con éxito ese proceso. «Si queremos tener éxito en esta negociación, y yo quiero tener éxito, debemos acelerar», afirmó durante una rueda de prensa el político francés, quien también anunció que la próxima semana Londres y Bruselas mantendrán una nueva ronda de negociaciones. Recordó que en solo 13 meses, tras el 29 de marzo del 2019, el Reino Unido ya no será un Estado miembro de la UE e insistió en organizar la retirada de forma «ordenada».