El número de dirigentes políticos que han tomado el camino del exilo no ha hecho más que crecer desde el 2014
19 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El movimiento contra el Gobierno de Nicolás Maduro por parte de dirigentes políticos que han tenido que tomar el camino del exilio no ha hecho sino crecer desde el 2014, cuando se registraron las primeras protestas serias con el objetivo de derrocar al mandatario. Ledezma y la fiscala general Luisa Ortega Díaz (cercana exiliada del chavismo) son los más prominentes entre los últimos venezolanos enviados al exilio.
Pero la «Venezuela disidente» viene de lejos. Concretamente desde el 2002, cuando prácticamente todos los políticos y empresarios que participaron en un golpe de Estado que derrocó por unas horas a Hugo Chávez tuvieron que hacer las maletas. Varios de ellos fundaron, en Miami, Veppex (Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exterior), y Orvex (Organización de Venezolanos en el Exilio), oenegés que aún se mantienen. Una tercera, Venezuela Awareness, hace seguimiento de las violaciones de derechos humanos que primero hizo Hugo Chávez y por las que ahora se acusa también a Nicolás Maduro.
Este último ha tenido mucho menos disimulo que su antecesor en perseguir a la disidencia; como dijo en una oportunidad Diosdado Cabello, número dos del chavismo, «Hugo Chávez era el muro de contención de nuestras locuras», advirtiéndole a la oposición venezolana, en el 2012, mientras el mandatario agonizaba, de que vendrían peores tiempos.
La primera ola de protestas contra Maduro no solo envió a prisión indefinidamente a Leopoldo López (el más importante de los presos políticos del país), sino también a Antonio Ledezma, que fue arrestado un año después, y acusado de «conspiración» y de «traición», cargos que nunca han podido ser probados. También envió al exilio a decenas de personas, entre ellas varios presos políticos, a quienes se les ofreció la salida del país como única posibilidad de salir de prisión.
De hecho, ya hay perseguidos que persiguieron en el exilio, como el fiscal Franklin Nieves, quien en el 2015 huyó de Venezuela para denunciar a Ortega Díaz como orquestadora de un juicio injusto en contra de López, y quien hoy comparte su exilio con su exjefa. Nieves acaba de explicar nuevamente cómo se manipuló el proceso del dirigente ante la Organización de Estados Americanos.
Ahora, Antonio Ledezma se erigirá como líder del exilio venezolano, con miras a «lograr que Maduro dé un paso al costado y permita que los venezolanos tengan libertad», como señaló en Colombia, luego de fugarse de Venezuela.