La oposición venezolana destaca su victoria y la amplia participación en las elecciones regionales

Pedro garcía otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

RICARDO MORAES | Reuters

Hubo incidentes aislados, sin víctimas, en unos comicios con un 40 % de abstención

16 oct 2017 . Actualizado a las 05:28 h.

La oposición venezolana se dio como ganadora por amplio margen en las elecciones regionales que se celebraron ayer, señalando que configuraban un cambio del «mapa de poder» y que la comunidad internacional podía tener por seguro que «se restituirá el Estado de derecho en Venezuela».

Hablando en nombre de la Mesa de la Unidad Democrática, Ramón Guillermo Aveledo, secretario internacional de la coalición opositora, solicitó, sin embargo, a los testigos y miembros de mesa de la oposición que custodien el recuento de los votos, y añadió: «Lo que ha ocurrido hoy [por ayer] es una enorme, gigantesca victoria del pueblo venezolano».

La jornada electoral estuvo marcada por los retrasos en la instalación de las mesas electorales y por la desorientación de miles de electores a los que les cambiaron de centro menos de 48 horas antes del comienzo de los comicios, en los que 18 millones de venezolanos fueron convocados para designar a 23 gobernadores regionales.

Se registraron incidentes y escaramuzas aislados en todo el país, con su peor manifestación en Guarenas, ciudad dormitorio aledaña a Caracas, en donde un grupo de motoristas identificados con los colores del chavismo agredieron a tiros a un grupo de votantes de la oposición. No resultó herida ninguna persona. Hubo, además, decenas de denuncias de robos a votantes por parte de varios grupos de motoristas en al menos tres regiones del país.

Henrique Capriles, excandidato presidencial y hasta ayer gobernador de Miranda, señaló que «el pueblo ha expresado su sentimiento de cambio» y desestimó que los incidentes con motoristas fueran espontáneos. «Esas fueron personas mandadas por el títere de [Nicolás] Maduro a la gobernación de Miranda».

Sin embargo, la presidenta del Consejo Nacional Electoral, Tibisay Lucena, indicó también que estas han sido las elecciones en las que «menos reportes de incidentes» se habían recibido, y hasta Henry Ramos Allup, secretario de Acción Democrática (el partido que más candidatos tiene en la coalición opositora), indicó que «el proceso ha sido normal, a pesar de las reubicaciones».

Los niveles de abstención, al cierre de la jornada, se estimaban en entre el 35 y el 40 %, por debajo de los niveles históricos para este tipo de comicios en Venezuela. Las estimaciones de la oposición señalaban que habían ganado entre 15 y 18 gobernaciones, entre ellas las del llamado corredor electoral, que concentra a los estados más grandes y poblados del país.

Sin ofrecer cifras, Eugenio Martínez, experto electoral, señaló que «se subestimó la abstención del chavismo, y se sobreestimó la abstención opositora», lo que explicaría un resultado electoral muy abierto.

Jorge Rodríguez, representante electoral del chavismo, afirmó, sin ofrecer resultados, que «había ganado la paz», y que «las elecciones muestran que Venezuela es muy capaz de resolver sus problemas internos sin intervención extranjera y sin sanciones de potencias extranjeras». Diosdado Cabello, número dos del chavismo, reiteró que los gobernadores tendrán que jurar ante la Asamblea Nacional Constituyente, que la oposición no reconoce, aunque la Ley Electoral señala que los gobernadores prestan su juramento ante los Consejos Legislativos regionales, cuya elección, hasta ahora, se desconoce, aunque, al igual que los gobernadores, tienen sus períodos vencidos desde hace más de un año.