EE.UU. frena el despliegue de su flota en Asia tras el siniestro de un destructor

ZIGOR ALDAMA PEKÍN / COLPISA

INTERNACIONAL

efe

El «McCain» chocó contra un petrolero en el cuarto incidente en un año en el Pacífico

22 ago 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Las víctimas mortales que se están cobrando las aguas de los mares de China no tienen nada que ver con el aumento de la tensión en la zona. Ni con los tambores de guerra que aporrean Corea del Norte y Estados Unidos, ni con los dardos dialécticos que se cruzan Pekín y media docena de países asiáticos. No, aparentemente, el mayor peligro reside en la falta de cuidado de los tripulantes de la Marina estadounidense. Este año ya han protagonizado cuatro accidentes en los que han muerto siete militares y ayer el Pentágono suspendió temporalmente el despliegue de su flota en la zona en pleno contencioso con Piongyang.

Ayer, un destructor americano, el John S. McCain, colisionó con un petrolero de la compañía griega Stealth, el Alnic MC, de bandera liberiana, cerca de Singapur, adonde se dirigía tras haber realizado labores ordinarias de patrulla. Las fotografías, en las que se ve un gran boquete en el casco del destructor, demuestran la violencia del choque, que dejó a diez marinos estadounidenses desaparecidos y cinco heridos. El trabajo del resto de los tripulantes, que sellaron los compartimentos afectados, impidió que el destructor se inundase y amenazara con hundirse.

Según la naviera griega, su buque, de más de 30.000 toneladas, sufrió daños en uno de los tanques, pero no heridos. Tampoco se produjo ningún vertido contaminante al agua. Singapur activó una operación de búsqueda y rescate de los marinos americanos, pero anoche no se había encontrado a ninguno. La ciudad-Estado ha aportado «dos patrulleras, una fragata, dos Super Pumas y un helicóptero Chinook», indicó el ministro de Defensa, Ng Eng Hen. Malasia ha enviado tres navíos y un helicóptero para colaborar en las operaciones.

Por su parte, el America, un buque anfibio de asalto, atracó también en la pequeña ciudad-estado para asistir a sus compatriotas. «Proveerá alojamiento y asistencia técnica al John S McCain», informó en un comunicado la Séptima Flota, que opera desde sus bases en Japón. El buque de guerra accidentado ayer, botado en 1988, tiene un agujero grande sobre la línea de flotación.

Ni Estados Unidos ni la compañía griega explicaron este sorprendente suceso. Si guarda alguna relación con la colisión que en junio protagonizaron el Fitzgerald y el mercante ACX Crystal o si podría ser producto de la falta de profesionalidad de la tripulación. Porque aquel accidente, según un informe oficial, se debió a la falta de vigilancia y preparación de la tripulación, incluidos los dos oficiales al mando, que no se encontraban en el puente cuando ambos buques chocaron. Tanto ellos como otros doce marinos han sido amonestados. «Demostraron muy poca capacidad de liderazgo y de navegación», sentenció el estudio de la Marina.