Erdogan atribuye a la fe del pueblo el fracaso del golpe

patricia alonso ESTAMBUL / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Reuters

El presidente turco recuerda a las miles de personas que se echaron a las calles del país hace un año para enfrentarse a los golpistas

16 jul 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

«Esa noche la gente no tenía armas, pero tenía una bandera. Y lo más importante, tenía fe». Así recordó el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, a las miles de personas, «su gente», que se echaron a las calles del país hace un año para enfrentarse a los golpistas. El de este sábado ha sido su discurso más islamista hasta el momento. «Lo que paró a esos tanques fue la fe», dijo.

La noche del 15 de julio del 2016 el pueblo turco salió a la calle, incitado por su presidente, para defender a la democracia del que hubiera sido el quinto golpe de estado en Turquía desde su fundación como república en 1923. Partidarios o no de Erdogan, los turcos temían las consecuencias del golpe, que se ha convertido en un gran trauma para el país. El balance de esa noche fueron 250 fallecidos y más de 2.000 heridos a los que miles de conciudadanos, políticos y familiares, rindieron tributo este sábado frente al Bósforo con un monumento erigido especialmente para la ocasión en el primer puente. «El lugar donde más sangre se derramó fue aquí, en el puente de los mártires del 15 de julio», dijo Erdogan. La ceremonia, concebida como una «vigilia de la democracia», finalizó con la oración de la mañana.

El partido republicano y principal opositor, CHP, decidió no participar finalmente en el acto después de que cambios de última hora en el programa eliminasen discursos de dos de sus miembros. El líder del partido, Kemal Kiriçdaoglu, encabezó recientemente la marcha por la justicia, que por primera vez desde las protestas del 2013 unió a la fragmentada oposición para protestar contra las consecuencias del golpe.

A pesar de que el primer ministro, Binali Yildirim, declaró recientemente que el ejército «es más poderoso hoy, cuando se le compara con el periodo anterior al 15 de julio», las imágenes elegidas para conmemorar el aniversario del levantamiento no han gustado a las fuerzas armadas. Consideran que las ilustraciones son humillantes y muestran al ejército como el enemigo.

Durante la conmemoración, Erdogan recordó a los líderes occidentales que «deben elegir entre su solidaridad con los terroristas o recuperar el favor del pueblo turco». En el último año, el presidente turco ha sido muy crítico con Alemania y otros países europeos por ofrecer asilo a aquellos que Ankara acusa de participar en el intento de golpe.

Erdogan también mostró su malestar con que los gobiernos e instituciones occidentales «esperasen a ver cómo se resolvía la crisis» antes de expresar su solidaridad con él.