Entra en vigor el último alto el fuego en Siria pactado por Trump y Putin

Agencias MOSCÚ

INTERNACIONAL

ALAA AL-FAQIR | REUTERS

El ejército sirio ha bombardeado esta madrugada varias zonas de la ciudad de Deraa

09 jul 2017 . Actualizado a las 18:58 h.

El alto el fuego para el suroeste de Siria anunciado el pasado viernes a tres bandas por Estados Unidos, Rusia y Jordania ha entrado en vigor a las 11.00 horas. El cese de hostilidades en la zona es el principio de un «acuerdo para la reducción del conflicto» entre el Ejército sirio y los grupos rebeldes del suroeste del país.

Un portavoz del Gobierno jordano, Mohamed Momami, ha explicado que el alto el fuego se aplicará en la «línea de contacto» acordada entre las fuerzas leales al régimen de Bachar al Asad y las milicias rebeldes, según la agencia de noticias oficial Petra. El objetivo, ha explicado, es contribuir a una rebaja «permanente» de las tensiones en la zona y al reparto de ayuda humanitaria, de cara también a crear un contexto en el que sea factible negociar una solución «política y permanente» a la guerra iniciada en marzo del 2011.

Horas antes del inicio del alto el fuego, helicópteros del Ejército sirio bombardearon esta madrugada varias zonas de la ciudad meridional de Deraa, según informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. Los ataques, que incluyeron el lanzamiento de dos misiles, se produjeron poco después de la medianoche, según el Observatorio, que agregó que, desde entonces, reina la calma tanto en Deraa, como en las provincias de Al Quneitra y Al Sueida, incluidas en el cese de las hostilidades.

Hace dos días y desde Hamburgo, el secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, ha admitido que aún quedan por cerrar detalles relativos a la seguridad, pero destacó la importancia del alto el fuego, que confía se haga extensible a otras partes de Siria.

El jefe de la diplomacia estadounidenses ha dicho que tanto su Gobierno como el ruso comparten el deseo de lograr la estabilidad de Siria, lo cual pasará en algún momento por un debate sobre Al Assad. Tillerson sostiene que el dirigente sirio no tiene cabida en el futuro del país.