El revestimiento del bloque incendiado en Londres era más barato e inflamable

EFE

INTERNACIONAL

HANNAH MCKAY | Reuters

La empresa proveedora del compuesto de aluminio que se usó para rehabilitar el exterior de la torre Grenfell ha reconocido al periódico que se le pidió la opción más económica

16 jun 2017 . Actualizado a las 19:44 h.

El material que se empleó para revestir la fachada del bloque de pisos incendiado el miércoles en Londres, durante unas obras de reforma en el 2016, era la opción «más barata e inflamable», según publica The Guardian.

La empresa Omnis Exteriors, proveedora del compuesto de aluminio que se usó para rehabilitar el exterior del edificio de 24 plantas, ha reconocido al periódico que se le pidió la opción más económica.

El director de la compañía, John Cowley, dijo a The Guardian que se le encargó el material llamado Reynobond PE, que es 2,3 euros más barato por metro cuadrado que Reynobond FR, el cual es «resistente al fuego». «Suministramos componentes para un sistema creado por el equipo de diseño y construcción de este proyecto», dijo Cowley. Según el diario, Harley Facades es la empresa que instaló los paneles comprados a Omnis en la torre Grenfell.

Rydon, la empresa de construcción subcontratada por el Ayuntamiento de Kensington y Chelsea para hacer las obras en el edificio de propiedad municipal, ha asegurado que éste «cumplía todos los estándares» de seguridad.

La primera ministra británica, la conservadora Theresa May, ha ordenado poner en marcha una investigación judicial, al margen de la policial, para establecer las causas y las responsabilidades en esta tragedia.

El alcalde de Londres, el laborista Sadiq Khan, ha pedido a May que haya un informe preliminar sobre el suceso este verano, para que los afectados no tengan que esperar mucho para obtener respuestas, y también que atienda las necesidades de los supervivientes.

Los residentes de la torre Grenfell, situada en el oeste de Londres y que incluye vivienda de protección oficial, llevaban años quejándose de la mala seguridad del edificio, construido en 1974, y de la falta de medidas contra incendios.

Como otros bloques similares de Londres, esta torre fue construida originalmente para albergar vivienda de protección social -que se asigna en el Reino Unido a las personas con pocos recursos-, pero en los últimos años, gracias a un cambio de la ley, algunos apartamentos han pasado a manos privadas.

El ayuntamiento del acomodado distrito de Kensington y Chelsea se continúa encargando del mantenimiento del edificio, aunque para ello subcontrata a unos administradores de fincas, la Organización de gestión de residentes de Kensington y Chelsea.

A medida que pasan los días, los supervivientes del incendio y otros vecinos de la zona están expresando su indignación porque durante años el consistorio ignorara sus quejas, y muchos lo atribuyen a que son «pobres».