Trump dice que EE.UU. necesita un «cierre» del Gobierno en septiembre para «arreglar el caos»

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

JIM LO SCALZO | EFE

Abogó por dejar sin presupuesto al Ejecutivo federal para provocar una confrontación partidista

03 may 2017 . Actualizado a las 07:14 h.

«Nuestro país necesita un buen cierre [del Gobierno] en septiembre para arreglar el caos». Con este tuit, Donald Trump abogó ayer por dejar sin presupuesto al Gobierno federal para provocar una confrontación partidista. Su enfado se debe a que el acuerdo entre republicanos y demócratas para dotar de fondos a las agencias federales hasta septiembre, y evitar así el cierre de la Administración, tira por la borda sus promesas electorales como incluir fondos para construir el muro con México o ampliar la fuerza de deportación en la frontera.

Un contrariado presidente incluso pidió un cambio en las reglas del Congreso, que requiere 60 votos en el Senado para aprobar el presupuesto federal. Los republicanos solo tienen 52 escaños. «¡O elegimos más senadores republicanos en el 2018 o cambiamos las reglas al 51 % ahora!», escribió en Twitter.

Horas después, Trump cambió radicalmente de discurso y vendió a la prensa el acuerdo bipartito como «una clara victoria para el pueblo estadounidense», debido a que incluye aumentos de fondos para defensa y seguridad fronteriza. Incluso aseguró que hay fondos suficientes para realizar «el pago inicial» para la construcción del muro. Una rectificación completa de unos tuits que complicaban los esfuerzos de los republicanos de presentar el acuerdo como un triunfo.

Relaciones peligrosas

Otro frente abierto contra el presidente son sus cálidas relaciones con dirigentes autoritarios o simples dictadores. Rodrigo Duterte, el presidente filipino acusado de ejecuciones extrajudiciales en su guerra contra las drogas, y el general Prayuth Chan Ocha, que asumió el poder en Tailandia tras un golpe de Estado, son los dos últimos invitados a la Casa Blanca. Unas invitaciones que han provocado críticas contra Trump y también más dudas sobre su errática política exterior

Sobre todo si a estas se añaden declaraciones como lo de que se sentiría honrado de reunirse con el líder norcoreano, Kim Jong-un, si se dan las circunstancias adecuadas, o su efusiva felicitación a Recep Tayyip Erdogan por la victoria en el referendo constitucional que le da un poder casi absoluto en Turquía. Por el despacho oval ya ha pasado el presidente Abel Fatah al Sisi, al que Trump elogió por su «fantástico trabajo», sin hacer referencia alguna a las violaciones de los derechos humanos en Egipto.