Primer pulso entre Rusia y EE.UU. por el ataque químico en Siria

R. P. REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

La estadounidense Nikki Haley, con fotos de las víctimas del ataque
La estadounidense Nikki Haley, con fotos de las víctimas del ataque SHANNON STAPLETON | reuters

Trump afirma que con ese suceso Al Asad ha cruzado «muchas líneas rojas»

06 abr 2017 . Actualizado a las 07:17 h.

Rusia se encontró ayer con el rechazó unánime de las potencias del Consejo de Seguridad de la ONU, incluida los Estados Unidos de Donald Trump, ante su negativa de unirse a la condena del ataque con gas sarín contra civiles sirios en Jan Shijún, localidad de la provincia rebelde de Idlib, en el que murieron al menos 72 personas, entre ellas una veintena de niños. La bronca sesión en el Consejo concluyó sin que tan siquiera se votara la propuesta de resolución presentada por Francia, Reino Unido y EE. UU.

Es la primera gran prueba para la relación entre Vladimir Putin y Donald Trump. En la Casa Blanca, y al lado del rey jordano, el presidente estadounidense aseguró que el ataque químico le ha hecho cambiar su actitud hacia el conflicto y Bachar al Asad. Para él este suceso «cruza muchas líneas» rojas. La «atroz» agresión contra «gente inocente, mujeres, pequeños niños e incluso pequeños bebés» es «una afrenta a la humanidad» y «esos actos de odio por el régimen de Al Asad no pueden ser tolerados», dijo. Sin embargo, no aclaró qué decisiones podría tomar y evitó pedir la caída del presidente sirio.

En las Naciones Unidas, la embajadora estadounidense, Nikki Haley, sugirió posibles medidas unilaterales contra Siria. «Cuando la ONU fracasa repetidamente en su deber de actuar de forma colectiva, a veces los Estados nos vemos forzados a emprender nuestra propia acción», dijo.

El borrador de resolución condenaba duramente el ataque contra Jan Sheijún, exigía una rápida investigación de los hechos e información detallada sobre las misiones aéreas del Ejército sirio del martes y el nombre de los pilotos de helicópteros del Gobierno. El borrador no incluía sanciones, pero amenazaba con medidas coercitivas de forma indirecta, según France Press.

Los embajadores británico, estadounidense y ruso protagonizaron un fuerte enfrentamiento verbal durante las dos horas de debate. El ruso, Vladimir Safronkov, defendió que las acusaciones se basan en «informaciones falsas» y atacó directamente a su homólogo británico, Matthew Rycrfot: «¿Acaso ha revisado lo que ha escrito? Este borrador ha sido preparado precipitadamente». Rycrfot, insistió en que los vetos rusos en el Consejo no hacen más que animar al régimen sirio a continuar matando.

«¿Cuántos niños más tienen que morir antes de que Rusia actúe?», dijo Haley, que llegó a responsabilizar directamente del ataque a Al Asad y sus aliados. «Aquí estamos hablando de crímenes de guerra, crímenes de guerra a gran escala, crímenes de guerra con armas químicas», fustigó el embajador francés, François Delattre,

Conferencia de Bruselas

El propio secretario general de la ONU, Antonio Guterres, se había mostrado «confiado» en que habría acuerdo, tras señalar que el ataque químico demuestra que «sigue habiendo crímenes de guerra» en Siria. Guterres participó en la conferencia sobre el país árabe organizada por la UE en Bruselas, en la que los 70 participantes que prometieron 5.630 millones de euros para asistir a la población y los refugiados sirios acogidos en países de la región, sin llegar a los 7.500 millones que solicitaba la ONU. La promesa de la UE fue 1.200 millones de euros este año y 560 millones en el 2018.