Al menos once muertos por una explosión en el metro de San Petersburgo

La Voz AGENCIAS

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La fiscalía rusa califica de «acto terrorista» la detonación. Un segundo artefacto explosivo ha sido localizado y neutralizado en otra estación. La policía busca a dos sospechosos

03 abr 2017 . Actualizado a las 21:52 h.

Al menos once personas han muerto y otras 45 han resultado heridas a causa de una explosión que se ha producido este lunes alrededor de las 14.40 horas (hora local) entre las estaciones de metro de Sennaya Ploshchad y el Instituto Tejnologuicheski, en San Petersburgo (Rusia). Siete murieron en el lugar de los hechos, una de camino al hospital y otras tres en el centro médico, ha detallado la ministra de Sanidad, Veronika Skvortsova. Seis de los heridos se encuentran en estado grave.

Once personas han muerto y otras 45 han resultado heridas como consecuencia de la explosión registrada este lunes en el interior de un tren del metro de San Petersburgo, según un nuevo balance divulgado por los investigadores a última hora del día y recogido por la agencia de noticias rusa Sputnik.

El Comité Antiterrorista de Rusia ha anunciado que la explosión se está investigando como un ataque terrorista, sin descartar «todas las otras pistas posibles». «Siempre estudiamos todas las posibilidades: accidental, criminal y, sobre todo, un acto con carácter terrorista», había declarado previamente el presidente ruso, Vladimir Putin. El mismo comité ha revelado, además, que se un segundo artefacto explosivo ha sido localizado y neutralizado en la estación de metro Ploshad Vosstania.

Dos sospechosos

Las cámaras de vigilancia del metro de San Petersburgo captaron imágenes de la persona que presuntamente colocó el artefacto que estalló. De acuerdo con Interfax, la bomba se encontraba en el interior de un maletín que fue abandonado en un vagón. Algunos medios han hecho circular una imagen que presuntamente mostraría al sospechoso, un hombre con barba, una túnica negra y un gorro, tanto en lo que sería el interior de la red de metro como a su salida de la estación de Sennaya.

Pero son dos las personas que buscan las autoridades, la que colocó la bomba que explotó y la que puso el artefacto neutralizado. «Estamos buscando a dos sospechosos de planear las explosiones, uno de los cuales habría colocado el artefacto en el vagón de metro y otro habría dejado una bomba en la estación de Ploshad Vosstania», ha asegurado una fuente de los servicios de seguridad citada por la agencia Interfax.

El metro de San Petersburgo reanudó parcialmente sus servicios tras cerrar sus puertas durante varias horas. Según la administración del metro, el más profundo del mundo al transcurrir bajo numerosos canales, las líneas 3, 4 y 5 funcionan ya con normalidad, mientras la 1 y 2 sólo funcionan parcialmente. Por motivos de seguridad, no funcionan los tramos donde se encuentran las dos estaciones afectadas por el atentado: «Tejnologuicheski Institut» y «Sennaya Ploschad».

Con todo, se han reforzado las medidas de seguridad en las entradas y salidas del metro de la antigua capital zarista, donde el atentado ha causado un auténtico colapso de transporte.

También se han reforzado las medidas de seguridad en el aeropuerto de la ciudad, «en particular los registros en la entrada y la inspección previa al vuelo», ha señalado la portavoz del aeródromo, Margarita Potejina. Además, en la capital rusa, Moscú, se ha reforzado la seguridad en la red de suburbano.

Fuentes consultadas por la televisión local Rossiya 24 han afirmado que se trata de artefactos explosivos que contendrían metralla. Imágenes difundas por la prensa rusa muestran una gran humareda y daños en los vagones de metro.

Putin se encuentra este lunes en San Petersburgo para reunirse con su homólogo bielorruso, Aleksander Lukashenko. El presidente ruso ha expresado sus condolencias a las familias de las víctimas y ha indicado que, si bien las causas aún no están claras, están valorando todas las opciones, incluido el móvil terrorista. Por su parte, el diputado del Consejo de la Federación Viktor Ozerov ha señalado que todos los indicios apuntan a un atentado terrorista.

La amenaza terrorista

En el pasado, se produjeron varios atentados contra el metro de Moscú que dejaron numerosos muertos, en su mayoría relacionados con el terrorismo islamista de Chechenia. Al menos 38 personas perdieron la vida en el 2010, cuando dos mujeres suicidas detonaron las bombas que llevaban en los abarrotados vagones de metro de Moscú. 

La amenaza sobre el país es latente después de que el Estado Islámico llamase a atacar el país a causa de la intervención rusa en apoyo a las fuerzas de Bashar al Asad en Siria, desde septiembre del 2015. Dentro de dos meses, la segunda ciudad más grande de Rusia acogerá la Copa Confederaciones de fútbol.

El 31 de octubre del 2015, un Airbus A321 de la compañía rusa Metrojet que iba desde el balneario egipcio de Sharm el Sheij hacia San Petersburgo se precipitó al suelo poco después del despegue. En el ataque reivindicado por el grupo Estado Islámico murieron 224 personas. En el 2013, dos ataques suicidas en Volgogrado dejaron 34 muertos pocas semanas antes del inicio de los Juegos Olímpico de Invierno en Sochi (2014).

No hay españoles entre las víctimas

El Ministerio de Asuntos Exteriores ha informado de que, por el momento, no hay constancia de que haya españoles afectados por la explosión. El consulado español en esa ciudad está pendiente de la situación y en contacto con las autoridades rusas, han explicado fuentes de Exteriores. En un tuit, el ministerio español recomienda evitar las zonas afectadas, extremar la precaución y seguir las indicaciones de las autoridades locales. El consulado de España en San Petersburgo ha puesto además un teléfono de emergencias para cualquier consulta: +7 921 551 30 86.

El maquinista no paró y ayudó a salvar vidas

El maquinista del metro no paró el convoy hasta llegar a la siguiente estación, lo que ayudó a evacuar a heridos y salvar vidas, según dijeron los investigadores. «El maquinista actuó sensatamente en una situación complicada. La explosión ocurrió entre dos estaciones, pero tomó la decisión absolutamente correcta de no parar el convoy hasta llegar a la estación», ha señalado la portavoz del Comité de Instrucción ruso, Svetlana Petrenko. «Esto permitió comenzar la evacuación inmediatamente y ayudar a los heridos», ha agregado.

Solidaridad internacional

La Unión Europea y la OTAN han expresado su solidaridad con Rusia por el atentado. «Nuestras condolencias hacia todos los rusos, especialmente para aquellos que han perdido a sus seres queridos. Continuaremos siguiendo las noticias de San Petersburgo con mucha comprensión», ha explicado en rueda de prensa la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini. «Nuestros pensamientos están con toda la gente de Rusia», ha publicado posteriormente Mogherini en su cuenta de Twitter.

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, también ha hecho pública su «profunda empatía con todos los afectados por la explosión en el metro de San Petersburgo, sus seres queridos y el pueblo ruso» a través de su perfil en la misma red social.

«Horrorizado por las noticias de la explosión en San Petersburgo. Mi solidaridad con las víctimas y sus familias», ha publicadoel ministro de Exteriores británico, Boris Johnson, en las redes sociales. También el ministro de Exteriores galo, Jean-Marc Ayrault, ha expresado «solidaridad con Rusia y las familias de las víctimas tras el drama en San Petersburgo» a través de su cuenta de Twitter.

Un portavoz de la canciller alemana, Angela Merkel, se ha solidarizado con Rusia por la explosión contra el metro en San Petersburgo. «Las noticias de San Petersburgo son terribles: nuestra solidaridad con todos los afectados y sus familias», ha expresado Steffen Seibert.

También Donald Trump se ha pronunciado sobre el ataque en San Petesburgo. «Terrible. Una cosa terrible. (Está) pasando en todo el mundo. Absolutamente una cosa terrible», comentó escuetamente ante los periodistas al inicio de un almuerzo a puerta cerrada con el mandatario egipcio, Abdelfatah al Sisi, en la Casa Blanca.