La protesta se salda con un muerto y el Parlamento incendiado
02 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Incendio político en Paraguay. Un joven murió, decenas de personas resultaron heridas y se produjeron hasta 200 detenidos durante las protestas violentas contra una polémica enmienda constitucional a favor de la reelección presidencial. Parte del edificio del Congreso de la República, en Asunción, fue quemado. En su interior irrumpieron cerca de un millar de manifestantes.
El fallecido es Rodrigo Quintana, líder juvenil del opositor Partido Liberal Radical Auténtico. Su muerte se produjo durante una intervención policial en la sede de la agrupación en Asunción. Efraín Alegre, líder del partido, herido también en un hombro tras ser impactado con una pelota de goma, dijo que la policía entró «de forma bárbara» en la sede liberal.
La Policía Nacional paraguaya ha rechazado tener responsabilidad alguna en el incidente. Señalaron no tener armas, mediante un comunicado. El fallecido recibió un disparo en la cabeza a corta distancia, según el médico que le atendió. El ministerio del Interior investiga la muerte del joven «presuntamente en manos de un efectivo de la Policía», según señaló el organismo en una nota enviada a los medios.
Una votación polémica
Las protestas se produjeron después de la polémica aprobación de una enmienda constitucional que permite la reelección presidencial, prohibida por la Carta Magna paraguaya.
No fue una votación al uso. Hasta 25 senadores del Partido Colorado del presidente Horacio Cartes y del Frente Guasú del ex presidente Fernando Lugo se reunieron en la sede senatorial de esa última agrupación para aprobar la enmienda.
El sufragio se realizó con la ausencia de los veinte senadores restantes y del presidente de la Cámara, certificando una insólita alianza entre conservadores e izquierdistas con el objetivo de presentar a sus líderes a las elecciones del 2018.
La crisis institucional es mayúscula. La enmienda debe ser ahora apoyada por el Congreso, donde el partido de Cartes tiene mayoría. «Insto a la ciudadanía a mantener la calma y a no dejarse llevar por quienes desde hace meses vienen anunciando hechos de violencia y derramamientos de sangre», dijo el presidente, en el poder desde 2013.
Cartes señaló en su alocución a un grupo de paraguayos que no escatimarán «esfuerzos para lograr el objetivo de destruir la democracia». La tensión no se rebajó con el paso de las horas. Los medios paraguayos reportaron desplazamientos de opositores desde algunas zonas del país para sumarse a las protestas contra la polémica enmienda constitucional.