Los sondeos le dan el 70 % de votos en las primarias socialistas
29 ene 2017 . Actualizado a las 09:57 h.Hay bastante curiosidad en Francia por conocer el desenlace de la segunda vuelta de las primarias socialistas, que se celebran hoy, y del que deberá salir el hombre que se enfrente a los candidatos de la derecha y la ultraderecha populista, François Fillon y Marine Le Pen. La elección se sitúa entre lo conocido, Manuel Valls, ex primer ministro de François Hollande, y Benoît Hamon, el candidato más inesperado de los comicios.
Siempre discreto en los sondeos desde el comienzo de su campaña, el ex ministro de Educación parecía incapaz de superar la tercera posición en la tabla, por debajo del propio Valls y del infatigable gladiador de la izquierda, Arnaud Montebourg. Sin embargo, su popularidad dio un sorprendente salto en la semana previa a las elecciones, de una forma bastante parecida a lo que ocurrió con Fillon en las primarias de la derecha. Según las últimas encuestas, Hamon podría derrotar hoy a su rival con alrededor del 70% de los votos.
Pese a que Valls cuenta con el apoyo de la mayoría de los ministros en funciones, los resultados de la primera vuelta han supuesto un duro castigo a la linea política del gobierno. Por otro lado, el bando de su mayor rival, Arnaud Montebourg, llamó a sus electores a votar por Hamon nada más conocer su derrota el pasado domingo.
El bretón tiene en su currículo político una larga historia de disidencias con la línea general Partido Socialista francés (PSf), en el que entró en contacto por primera vez a través de las juventudes socialistas cuando era estudiante de Historia en la Universidad de Brest. En 1993, cofundó con Arnaud Montebourg y Vincent Peillon [dos de sus rivales en la primera vuelta de las primarias] las corrientes de la Nueva Izquierda y posteriormente el Nuevo Partido Socialista, al no estar de acuerdo con las políticas liberales económicas del PSF.
El grupo se rompió en 2007 con la derrota de la candidata socialista ante Nicolás Sarkozy, Segolene Royal. Tras la victoria de Hollande en 2012, fue nombrado ministro de Economía Social y Solidaria en el gobierno de Jean-Marc Ayrault y, dos años más tarde, con la llegada de Valls, se hizo cargo de una cartera de mayor relieve, la de Educación, aunque la desempeñó poco tiempo .
En agosto de 2015, después de tan solo cuatro meses en el ministerio, Hamon se unió al grupo de ministros que decidieron dimitir para protestar por la línea de austeridad impuesta al Ejecutivo por Valls. «Habría sido incoherente que, tras expresar mi desacuerdo, me quedase en el gobierno», justificó entonces. El candidato pertenece al ala más a la izquierda del PSf y ha criticado a lo largo de su carrera política las derivas liberales del partido.
Salario universal
Su programa se centra en lo social y lo ecológico y su buque insignia es la instauración de un salario universal para luchar contra el desempleo resultante de la mecanización del trabajo. Hamon pretende financiar la dotación de alrededor 500 euros al mes para todos los franceses con una novedosa iniciativa, el aumento de los impuestos a las empresas a cuenta de los robots y las máquinas. Además, quiere legalizar la eutanasia, la marihuana y la reproducción asistida a mujeres solas y parejas homosexuales.
Su compromiso con la izquierda de los socialistas fue cuestionado, sin embargo, cuando se reveló hace unas semanas que su esposa, Gabrielle Aguilar, tiene un alto puesto en el grupo de lujo LVMH, al que pertenecen marcas como Louis Vuitton, Moët Chandon o Christian Dior. Hamon respondió a las criticas diciendo que su mujer «tiene un buen trabajo, pero no es gracias a mí».
Los agentes buscan pruebas contra la mujer de Fillon
La Policía llevó a cabo el jueves un registro en la sede de La Revue des Deux Mondes, una publicación en la que estuvo supuestamente contratada la esposa del candidato de la derecha francesa, François Fillon, informó ayer la emisora Europe 1. Los agentes buscaban pruebas de que el empleo de Penelope Fillon era ficticio. En el registro estuvo presente el propietario y empresario Marc Ladreit de Lacharrière, conocido por su proximidad a Fillon.