Evo Morales busca un resquicio legal para optar al cuarto mandato

Gerardo bustillos IVIRGARZAMA / AFP

INTERNACIONAL

DAVID MERCADO | Reuters

Su partido evalúa como revertir el rechazo en el referendo de febrero

19 dic 2016 . Actualizado a las 07:50 h.

Evo Morales celebró este domingo el aniversario de su primer triunfo electoral como presidente de Bolivia, con un gran regalo: su partido, el Movimiento Al Socialismo (MAS), lo postulará para un cuarto mandato, pese a que un referendo le negó esa posibilidad. Pero también con una contrariedad: la ausencia de sus principales aliados en la región, el venezolano Nicolás Maduro y el ecuatoriano Rafael Correa.

Los actos del Día de la Revolución Democrática y Cultural arrancó con una masiva concentración popular en Ivigarzama (Cochabamba) territorio de productores de coca y bastión político de Evo. El presidente acudió a la cita aupado por la decisión del congreso nacional de MAS, que concluyó el sábado, de proponer cuatro mecanismos jurídicos para posibilitar su reelección en el 2019, pese a estar legalmente inhabilitado después de que la opción de un cuarto mandato fuera rechazada en un referendo el febrero pasado.

Morales ganó su primera elección en el 2005 con el 54 % de los votos, revalidó el cargo en el 2009 con 64 % y en el 2014 con el 61 % de los sufragios. Siempre, frente a una oposición desmembrada que no consigue hacerle frente. Su única gran derrota fue la de febrero que, según Morales, respondió a acusaciones opositoras de un supuesto hijo suyo con la representante de una empresa china que tiene millonarios contratos con el Estado. Se comprobó la inexistencia del menor, mientras su expareja está detenida y es investigada por blanqueo de ganancias ilícitas.

El primero de los resquicios legales propuesto por el MAS para reelegir a Morales es una reforma parcial de la Constitución a través de una iniciativa ciudadana para recolectar firmas de 20 % del padrón electoral. El segundo, una reforma constitucional para permitir la reelección consecutiva por más de un período. El tercero es que el presidente renuncie antes de las elecciones del 2019, adelantando el término de su actual mandato, y el cuarto supone la habilitación de un nuevo Gobierno mediante la interpretación de la Constitución.

Morales quería festejar este día con Maduro y Correa, los últimos exponentes de la corriente denominada «socialismo del siglo XXI», que en el último año perdió dos importantes aliados (Cristina Kirchner y Dilma Rousseff), a lo que hay que sumar la muerte de Fidel Castro. En Bolivia «estamos rodeados de gobiernos de derecha», dijo recientemente Morales. Para la senadora opositora Jeanine Añez, el oficialismo «no quiere respetar la decisión de la gente» que votó no en el referendo.