Ellos podrían ser los futuros hombres del presidente

CLÁUDIA MORÁN REDACCIÓN

INTERNACIONAL

ERIC THAYER

El exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani o el expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich son algunos de los nombres que suenan con fuerza para la futura administración Trump

10 nov 2016 . Actualizado a las 19:29 h.

Todavía no han pasado 48 horas tras la victoria de Donald Trump en las presidenciales de Estados Unidos y ya suenan con fuerza varios nombres que podrían ocupar las carteras de la nueva administración. Entre los futuros hombres del presidente (porque todos los que suenan son hombres) destacan algunos muy conocidos como el exalcalde de Nueva York Rudy Giuliani o el expresidente de la Cámara de Representantes Newt Gingrich, quien también estuvo en la carrera de las primarias del partido republicano en el 2012. Por el momento, lo único que se sabe a ciencia cierta es que Mike Pence, el gobernador de Indiana, será el vicepresidente del país. Estos son algunos de los posibles pesos pesados de la administración Obama.

Secretario de Estado

Newt Gingrich podría convertirse en el dirigente de la Secretaría de Estado estadounidense y, por tanto, en el número dos de la administración Trump. A sus 73 años es una de las caras más conocidas del partido republicano, con un perfil conservador que despierta las simpatías del Tea Party. Se presentó a las primarias del 2012 para conseguir la nominación a la Casa Blanca, pero finalmente consiguió solo 164 delegados frente a los 1.524 de Mitt Romney. Durante la campaña de este año fue uno de los mayores apoyos de Trump y quizá por eso su nombre suena con más fuerza que otros, como el del senador Bob Corker, actual presidente del comité de relaciones exteriores del senado.

A mediados de los noventa, mientras ejercía de presidente de la Cámara de Representantes, Gingrich se convirtió en la peor pesadilla de Bill Clinton al ser uno de los mayores impulsores de su impugnación presidencial por su aventura con Monika Lewinsky, aunque el expresidente consiguió salir airoso.

Fiscal General

Para ocupar la cartera de justicia se baraja otro nombre muy conocido en la política estadounidense: Rudy Giuliani, alcalde de Nueva York entre 1994 y el 2001. Es conocido como «el alcalde del 11-S» o «el alcalde de Estados Unidos» por desempeñar un papel muy proactivo durante y después de los atentados, gracias al cual se convirtió en el protagonista de la portada de la revista Time como el personaje del año. 

Sin embargo, también fue muy criticado por introducir los cacheos aleatorios, algo que se interpretó desde diversos frentes como una práctica de discriminación racial. Poco le importa este aspecto, no obstante, a Donald Trump, quien apoyó abiertamente esta medida de su compañero de partido. Otra curiosidad de Giuliani es su postura sobre el aborto, ya que a pesar considerarlo una práctica «moralmente errónea» en unas declaraciones del 2007, afirmó que «garantizaría el derecho de las mujeres a elegir libremente».

Consciente de que se perfila como uno de los candidatos a la cartera de Fiscal General, Giuliani se apresuró a declarar que «nadie conoce mejor» que él «el Departamento de Justicia».

Jefe de Gabinete

Quien se baraja con más fuerza para ser el futuro director de gabinete de Trump es el actual presidente del Comité Nacional Republicano, Reince Priebus, quien también presidió el partido republicano en Wisconsin. 

 Secretario de Comercio

El actual gobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, fue uno de los nombres barajados para convertirse en el vicepresidente del partido republicano, pero Trump optó finalmente por Mike Pence. Por eso ahora se especula sobre la posibilidad de que Christie pase a ocupar una de las carteras de la administración del presidente electo, entre ellas, la Secretaría de Comercio.

Pero hay algo que podría jugar en su contra, y es que dos de sus principales colaboradores fueron declarados culpables de provocar embotellamientos en el puente más transitado del mundo, el que une Nueva Jersey y Manhattan, para perjudicar a un alcalde que no quiso apoyar a Christie en su reelección como gobernador.

Secretario de Defensa

El actual senador de Alabama, Jeff Sessions, fue otro de los aspirantes a la vicepresidencia del partido republicano y Trump, que lo ha elogiado en público en más de una ocasión, podría quererlo para su equipo. En este caso, el nombre de Sessions se baraja para ser el dirigente de nada menos que el Pentágono. Pero hay algo que, a priori, lo distancia de Donald Trump: Sessions fue uno de los mayores defensores de la invasión estadounidense de Irak en el 2003, mientras que el futuro presidente se refirió a esta operación militar como «algo terrible y estúpido».

Otro posible candidato para la Secretaría de Defensa es Michael Flynn, exgeneral y exdirector de la Agencia de Inteligencia de Defensa, de la que asegura que fue forzado a salir por su visión sobre el islamismo radical y, de hecho, fue muy crítico con la estrategia de Obama para combatir al Estado Islámico. Durante la campaña asesoró a Trump en defensa y, por ello, sería el perfil más lógico para ocupar el puesto; pero todavía no se han cumplido siete años desde que se retiró y, según está recogido en la ley estadounidense, para que esto pueda ocurrir el Congreso tendría que autorizarlo. 

Consejero de Seguridad Nacional

En el abanico de candidatos para el puesto de Consejero de Seguridad Nacional suena también el nombre de Michael Flynn, quien además ejerció de vínculo fundamental entre Trump y los veteranos durante la campaña electoral. 

Secretaría del Tesoro

Todo parece indicar que Steven Mnuchin, actual asesor financiero de Trump, podría ser el futuro Secretario del Tesoro de la nueva administración. El propio presidente electo ha manifestado que lo quiere en su equipo. Es uno de los grandes entendidos de Wall Street y cuenta con 17 años de experiencia en Goldman Sachs, uno de los grupos de inversión más grandes del mundo. También es el fundador de Dune Entertainment, la productora de grandes éxitos cinematográficos como la saga X-Men.

El problema es que podría ocurrir que los partidarios de Trump no aceptasen a una persona tan vinculada a Wall Street como Mnuchin. En ese caso, otro posible secretario del tesoro podría ser el empresario Carl Icahn o el ex director ejecutivo de General Electric Jack Welch.