Orbán pide a los húngaros que voten contra la política migratoria de los «burócratas» de la UE

La Voz REDACCIÓN / AGENCIA

INTERNACIONAL

Budapest.
Budapest. ATTILA KISBENEDEK | AFP

«Cuantos más inmigrantes, más riesgo de terrorismo», declaró el primer ministro en una entrevista en televisión

01 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La política contra los refugiados del primer ministro húngaro, Víktor Orbán, será sometida mañana a referendo, todo un desafío a Bruselas. En el último día de campaña, Orbán pidió ayer a la población que rechace la imposición de cuotas migratorias dictada por los «burócratas» de la UE y restó importancia a la posibilidad de que el plebiscito sea declarado inválido por falta de participación.

Los sondeos estiman que el no ganará la consulta, cuyo único suspenso reside en la tasa de participación. «Con que haya más votos en contra que a favor, me basta para entender que los húngaros no aceptan el régimen que los burócratas de la Unión Europea quieren imponernos», declaró Orbán en una entrevista a la cadena TV2. «Cuantos más inmigrantes, más riesgo de terrorismo. Queremos preservar Hungría como el país seguro que es ahora», añadió. Incluso se declaró dispuesto a pedir una reforma de la política migratoria de la UE si percibe que cuenta con suficiente apoyo popular. Las negociaciones, añadió, podrían incluso comenzar la semana próxima.

La pregunta planteada a los húngaros resume el desafío a Bruselas: «¿Quiere que la Unión Europea decrete una relocalización obligatoria de ciudadanos no-húngaros en Hungría sin la aprobación del Parlamento húngaro?». «El referendo es un ejercicio nacional de Orbán. Y como le envalentone aún más, no se esperan buenas noticias para la UE», apuntaron a Reuters fuentes diplomáticas. La Comisión Europea afirma que el referendo no tendrá ningún impacto jurídico en los compromisos adoptados.

Unas dos mil personas se congregaron ayer en la plaza Kossuth, donde se encuentra la sede del Parlamento, para pedir al Gobierno una política más humana frente a los refugiados. Una treintena de artistas se unieron a la protesta con un proyecto titulado «Testimonio», que rinde tributo a las víctimas de la ciudad siria de Alepo.