
Francia le advierte que no tiene un «cheque en blanco» para violar derechos
18 jul 2016 . Actualizado a las 11:26 h.El levantamiento rebelde de una facción del ejército y su posterior derrota ha desatado en las últimas horas la furia y la venganza de Recep Tayyip Erdogan, quien no ha dejado escapar la oportunidad para hacer limpieza entre sus opositores. La lista asciende a más de 6.000 detenidos. Magistrados y militares están en el foco de su ira. La Unión Europea asiste con inquietud a este nuevo giro autoritario en Turquía. Para los 28 habrá un antes y un después en cuestiones de vital importancia para su seguridad, como la migración y el terrorismo. El país otomano retrocede en su interminable camino hacia su adhesión al euroclub y avanza peligrosamente por la senda de la dictadura.
¿Cómo ha reaccionado la UE a las purgas?
La represión feroz de los insurrectos ha hecho saltar todas las alarmas. Los 28 ministros de Exteriores abordarán hoy en Bruselas la escalada de tensión en Turquía y cómo el nuevo escenario puede afectar a los acuerdos con el país vecino. Ayer el ministro galo, Jean-Marc Ayrault, se mostró inflexible ante la actitud despótica de Erdogan. El golpe de Estado fallido «no es un cheque en blanco. No debe haber purgas», advirtió el francés para quien Turquía «está lejos» de aplicar «a todos los niveles» el Estado de derecho. Ayrault recordó a la contraparte turca que «deberán ajustarse a las reglas democráticas europeas» si quieren avanzar en el proceso de adhesión y mantener las relaciones comerciales y diplomáticas con la UE. El gerifalte turco está lejos de cumplir con las exigencias de sus socios europeos. En sus últimas manifestaciones públicas ha sugerido que volverá a instaurar la pena de muerte, abolida en el 2004 como parte del catálogo de requisitos europeos. Tampoco el ministro alemán de Justicia, Heiko Maas, se mantuvo al margen y alertó de la «venganza arbitraria» que está ejecutando Erdogan.
¿Cómo afectará al proceso de adhesión de Turquía?
La reinstauración efectiva de la pena de muerte cerraría de par en par las puertas de la UE. Las maniobras represivas de la libertad de expresión y la violación manifiesta de derechos humanos obligarán a la UE a revisar el proceso. La negativa del Gobierno turco a enmendar la legislación antiterrorista de la que se vale Erdogan para perseguir a opositores políticos y críticos ha hecho encallar la liberalización de visados, pero lo que ahora se presenta por delante es peor. La libertad de expresión está secuestrada, los derechos humanos no se cumplen y no existe separación de poderes. Las purgas en los tribunales permitirán a Erdogan aplicar su justicia. La debilidad democrática de las instituciones obliga a la UE a replantear el acuerdo migratorio y su colaboración antiterrorista. El ministro Ayrault admitió ayer que Erdogan no inspira confianza en la lucha contra el yihadismo: «Siendo sinceros, hay una parte de fiabilidad y otra de sospecha».
Jueces para la Democracia alerta de la detención de magistrados y fiscales
Jueces para la Democracia ha escrito una carta al presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, en la que advierte de que tras el intento del golpe de Estado en Turquía al menos 200 jueces y fiscales de ese país han sido detenidos y encarcelados, incluido un magistrado del Tribunal Constitucional turco.
En la misiva, esta asociación afirma que ha tenido conocimiento de que el Consejo Superior de Jueces y Fiscales de Turquía ha suspendido de sus funciones a 2.745 jueces y fiscales, de los que al menos 200 «han sido objeto de detención y encarcelamiento».
La asociación se muestra en la carta «profundamente» preocupada por la situación personal y profesional de sus «colegas» por lo que insta al Gobierno de Rajoy a intervenir ante las autoridades turcas y europeas para que «se ponga fin a esta injusta situación y se respete escrupulosamente la independencia judicial, la separación de poderes y el Estado de Derecho».
Para la asociación, la rapidez con la que se ha producido la suspensión de funciones y las detenciones «hace sospechar» en la «premeditación y arbitrariedad de esas decisiones» y sostiene que «sin lugar a dudas», se incardinan «en los intentos durante estos meses de desestabilizar e incluso depurar la Judicatura y la Fiscalía» por parte del presidente turco, Recep Tayyip Erdogan.
Asegura también que, en su momento, Jueces para la Democracia como miembro de la organización MEDEL, que reúne a varias asociaciones de jueces y fiscales de Europa y también de Turquía, informó a la UE de los «repetidos ataques» a la independencia judicial en Turquía.
Boris Johnson se estrena en Bruselas
El nuevo titular de Exteriores británico, Boris Johnson, acudirá hoy a la cita de la diplomacia europea en la capital belga. Es la primera visita que hace a Bruselas desde que el Reino Unido certificó el «brexit» y la primera como ministro. La expectación es máxima. Las continuas salidas de tono del británico todavía rezuman en la memoria de sus homólogos. «Es un político astuto. Tiene mucha experiencia», aseguró ayer el titular de Exteriores alemán, Walter Steinmeier, al tratar de desdramatizar el encuentro. La jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, trasladó ayer a Johnson su intención de «cooperar» en el proceso de salida.