El abogado de Leopoldo López denuncia la requisa en la cárcel de documentos básicos para su defensa

Pedro Otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

CARLOS GARCIA RAWLINS | Reuters

El letrado denuncia la tortura constante al político, aunque confía en su absolución

07 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Juan Carlos Gutiérrez, jefe del equipo de abogados del preso político venezolano Leopoldo López, declaró que presentarán 16 puntos de apelación de la sentencia que lo condenó en 2015 a 14 años de cárcel por los delitos de asociación para delinquir, daños a la propiedad pública e incendio en grado de inductor. El letrado indica que la Corte de Apelaciones de Caracas, que conocerá el caso hoy (su decisión la presentará en unas seis semanas), tiene «la responsabilidad de restablecer el estado de Derecho en Venezuela», y que la libertad de López, preso desde 2014, «no es un asunto político, que se pueda discutir en una mesa de negociación, sino jurídico».

Gutiérrez alabó la colaboración recibida de Alberto Ruiz Gallardón, quien llegó ayer a Caracas a colaborar en la defensa de López, y del resto de los juristas internacionales, con el exjefe de Gobierno español, Felipe González a la cabeza, que han colaborado con el proceso. El abogado señaló: «Hemos revisado jurisprudencia nacional e internacional, casos de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el Tribunal Europeo de Derechos Humanos, la Organización de las Naciones Unidas; del Tribunal Constitucional Español y la Corte Constitucional colombiana, vinculados a asuntos similares y toda la jurisprudencia nacional e internacional que mañana vamos a presentar ante la Corte de Apelaciones apunta hacia la nulidad y la absolución».

El abogado atendió a La Voz de Galicia minutos antes de ingresar en la cárcel militar cercana a Caracas donde se encuentra López, de quien dijo: «Tiene una gran resiliencia». Añadió sin embargo, que «La situación aquí en la cárcel de Ramo Verde es dura, es de aislamiento. La semana pasada le hicieron una requisa salvaje y le quitaron todos los papeles que había preparado personalmente para su defensa, todos los puntos de su argumentación. La realidad de este caso es no solo la violación del debido proceso, sino una situación de tortura constante».

Gutiérrez agregó que, pese a las presiones políticas del caso, que apuntan directamente al presidente venezolano, Nicolás Maduro, «la Corte de apelaciones tiene la obligación de sentenciar conforme a la legalidad. Independientemente de que el resultado beneficie a Leopoldo López o perjudique al presidente de la República. Los jueces tienen que deslastrarse de los efectos de una sentencia, eso es lo normal en un Estado democrático».