Blair quiere que se mantengan las opciones abiertas

RITA ÁLVAREZ TUDELA LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

PETER NICHOLLS | Reuters

El ex primer ministro considera que el 48 % de los ciudadanos que votaron por la permanencia están marginados

04 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Marginados. Así ve el ex primer ministro laborista Tony Blair al 48 % de los ciudadanos británicos que votaron a favor de la permanencia en la Unión Europea en el pasado referendo tras la victoria del brexit. Por eso, pide que Reino Unido mantenga las «opciones abiertas» en la salida del bloque común.

Para Blair no está nada claro hacia dónde se mueve el país y es de los que creen que Londres debe iniciar conversaciones inmediatas con la UE, para así ver su margen de maniobra. Eso quiere decir que el primer ministro, David Cameron, mueva ficha, sin esperar a que los conservadores decidan su liderazgo. Además, no tuvo reparos en reconocer que el papel del Reino Unido «ha disminuido su lugar en el mundo» tras anunciarse el resultado del referendo.

Lo que sí está claro es que esta no será su mejor semana. El miércoles se hará finalmente público el esperado informe Chilcott sobre la guerra de Irak. La comisión independiente fue puesta en marcha en el 2009 y se espera que ahora se saque a la luz la implicación que Blair tuvo como primer ministro.

Mientras, el actual líder laborista, Jeremy Corbyn, tampoco vive su momento más dulce. Tras el revés en la moción de confianza de sus compañeros parlamentarios, ahora señala que está dispuesto a hablar con ellos. Eso sí, reconoce que en el caso de que se convoquen primarias de nuevo, volverá a presentarse. Y falto de apoyos no estará, pues solo en la última semana unas 60.000 personas se han afiliado al laborismo que él promueve. 

Maniobras conservadoras

En las filas conservadoras, dos de los candidatos a hacerse con el liderazgo del partido, Michael Gove y Andrea Leadsom, presionaron ayer para que el próximo líder sea uno de los que apoyaron el brexit. Un claro intento por quitarle puntos a Theresa May, ya que ella fue partidaria de seguir en el bloque común y ahora es la favorita en las quinielas.

May aboga por que los ciudadanos quieren algo más que «un primer ministro del brexit» y pone de relieve que se debe acabar con la división que generó el referendo. Algunos medios rumoreaban ayer que un sector conservador pedía al resto de candidatos su renuncia para que May pudiese comenzar a trabajar en Downing Street, pero ella lo rechazó tajantemente, ya que quiere que haya un «proceso competitivo».

Mientras, ante el desconocimiento de qué sucederá con la residencia y los derechos de los comunitarios que ya viven en Reino Unido, la primera ministra escocesa, Nicola Sturgeon, exigió garantías a Londres. La escocesa lo considera un «imperativo» para los 173.000 ciudadanos comunitarios en suelo escocés, siendo muchos de ellos gallegos en Edimburgo y Glasgow.