La corrupción de Petrobras se lleva por delante al hombre fuerte del Gobierno de Temer

LA VOZ REDACCIÓN

INTERNACIONAL

EVARISTO SA | AFP

El ministro de Planificación Romero Jucá dimitió tras recibir un recado del presidente interino pidiéndole que diera públicas explicaciones

25 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Once días tardó en empezar a descomponerse el Gobierno interino de Brasil presidido por Michel Temer, lo que sirve para hacerse una idea de hasta qué punto la corrupción, y muy en especial la que prosperó alrededor de Petrobras, está enquistada en la política brasileña. Ayer, el ministro de Planificación y hombre fuerte del nuevo Ejecutivo, Romero Jucá, dimitió tras recibir un recado del presidente interino pidiéndole que diera públicas explicaciones.

Jucá, que regresó a su escaño en el Senado, presentó inicialmente su renuncia como un «permiso» mientras la Fiscalía examinaba su solicitud de que «determine si hubo crimen», pero poco después confirmó que Temer le pidió que dimitiese.

Fue una conversación telefónica con Sergio Machado, expresidente de una subsidiaria de Petrobras, Transpetro, destapada el lunes el desencadenante del escándalo. «Hay que resolver esa mierda. Hay que cambiar el Gobierno para cortar esta sangría», afirmaba Jucá. En las explicaciones que proporcionó, instado por su presidente, alegó que se refería a la crisis económica, pero la conversación, divulgada más tarde por Folha de São Paulo, no dejaba lugar a dudas de que la «sangría» era la investigación de la petrolera y el medio para frenarla, la destitución de Dilma Rousseff. La conversación tuvo lugar días antes de la votación en la Cámara baja del proceso de impeachment, del que el ya exministro fue uno de los principales impulsores.

Hombre fuerte de Temer, a Jucá le había encargado la tarea de reactivar la economía, una de sus grandes promesas. El presidente destacó en un comunicado su «dedicación [...] en el correcto diagnóstico de nuestra crisis financiera y la excepcional formulación de medidas». Ayer mismo fueron presentadas estas medidas, entre las que figura la anticipación del pago de una deuda del Banco de Desarrollo al Tesoro Nacional y una reforma constitucional para poner un techo al crecimiento de los gastos del sector público, que según Temer «se encuentran en una trayectoria insostenible». Jucá será sustituido por Dyogo Oliveira, exsecretario de la cartera.