El Gobierno británico afirma que el «brexit» costará 5.400 euros a cada familia

Rita Álvarez LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

MATT CARDY | Afp

El Tesoro perdería ingresos por importe de un tercio del presupuesto de sanidad

19 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Un desplome del Producto Interior Bruto, una subida de impuestos y un coste de 5.400 euros anuales para cada hogar británico. Esas serían las tres principales consecuencias para el Reino Unido en caso de votar salir de la Unión Europea en el referendo del 23 de junio, advirtió ayer el ministro de Hacienda, George Osborne. «Reino Unido va a ser permanentemente más pobre si deja la UE. Bajo ninguna alternativa, nos gustaría comerciar menos, hacer menos negocios y recibir menos inversión», explicó al presentar el informe de 200 páginas con el que el Gobierno pretende convencer a los británicos de seguir dentro.

Osborne advirtió de que el precio más alto lo pagaría cada familia, pues «sus salarios serían más bajos y los precios más altos». El conservador cifró en 36.000 millones de libras el total de ingresos fiscales netos anuales que dejaría de ingresar Londres en caso de divorcio con la UE. La cifra equivale a un tercio del presupuesto anual para el sistema de salud, conocido como NHS, puntualizó.

El informe advierte de que el PIB se reduciría hasta el 6,2% para el año 2030 y predice que, incluso en el caso de que Londres firmase acuerdos comerciales similares a los de Canadá con Bruselas, habría «barreras importantes» para el mercado de exportación más importante con que cuenta el Reino Unido, más de 500 millones de consumidores. Sería, además, un largo proceso conseguir dicha situación pues Canadá tardó siete años en negociarla y todavía no ha entrado en vigor, advirtió Osborne, en lo que parece una bala directa al aún alcalde de Londres, Boris Johnson, partidario del brexit y quien defendió recientemente este modelo para Londres.

La presentación del documento, considerado clave en la campaña del equipo de Cameron para conseguir el voto del 20% del electorado que permanece indeciso, coincidió con la publicación de una columna de Osborne en The Times, en la que denunció a los partidarios del brexit porque «cada vez que alarman con un proyecto de miedo, solo se expone lo débil y poco amigable de su campaña». En declaraciones a la BBC, Osborne tampoco tuvo reparos en desafiar a sus oponentes a que presenten sus propios análisis. Tan solo dos días después del inicio de la campaña, el tono utilizado por el responsable de Hacienda fue muy duro, pues llamó a los favorables de la salida «económicamente analfabetos».

Los partidarios de romper relaciones no dudaron en calificar el informe de «poco patriótico». El conservador John Redwood definió el análisis como «completamente inútil y un ejemplo más del alarmismo del Gobierno». Otro euroescéptico, Chris Grayling, no tiene ninguna duda de que Londres va a seguir comerciando con los países de la eurozona sin tener que pagar impuestos adicionales. Según dijo, la que más tiene que perder es Europa porque «compramos mucho más de lo que la UE nos compra a nosotros»