La policía brasileña lanza una macrorredada contra la trama de corrupción de Petrobras

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

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PAULO WHITAKER | reuters

La operación se salda con 110 registros en oficinas y viviendas de trabajadores de la constructora Odebrecht, 15 arrestos preventivos y 28 detenciones

23 mar 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Casi 400 agentes participaron ayer una macrorredada contra la trama de corrupción alrededor de Petrobras, que el empresario de la construcción Marcelo Odebrecht seguía manejando desde la cárcel.

La Policía Federal llevó a cabo 110 registros en oficinas y viviendas de trabajadores de la constructora Odebrecht, 15 arrestos preventivos y 28 detenciones para interrogatorios de presuntos involucrados en la contabilidad paralela de la empresa. La operación, que forma parte de una nueva extensión de la operación Lava Jato, se desarrolló de forma paralela en varias ciudades de nueve estados, entre ellos São Paulo, sede de Odebrecht. La operación alcanzó, como sospechoso de pagar sobornos, al «director de infraestructuras responsable de la construcción del estadio de Corinthians», donde se jugó el partido inaugural del Mundial del 2014.

El expresidente de la constructora, Marcelo Odebrecht, detenido en junio del 2015 y condenado hace unos días a 19 años y 4 meses de cárcel por corrupción, siguió dirigiendo desde la cárcel el pago de sobornos, que había organizado, «profesionalizado e institucionalizado», según Renata Rodrigues, de la Policía Federal de Curitiba, la ciudad desde donde el juez Sergio Moro desarrolla la operación Lava Jato.

El juicio político a Rousseff

La comisión parlamentaria que analiza si se abre juicio político a Dilma Rousseff rechazó anexar al proceso testimonios según los cuales la presidenta sabía de la corrupción en Petrobras e intentó obstruir la investigación judicial.

Según O Globo, el MPDB, socio en el Gobierno de Rousseff, ya empezó a redactar con el principal partido de la oposición, el PSDB de Aécio Neves, el borrador de un posible Gobierno de transición en caso de que el impeachment prospere.

El juez del Supremo Luiz Fux rechazó una petición de la Abogacía General para revertir la suspensión del nombramiento del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva como ministro que ordenó otro magistrado del alto tribunal, Gilmar Mendes, y determinó que la decisión final corresponde al pleno del Supremo. Otra magistrada del alto tribunal, Rosa Weber, rechazó también un recurso del propio Lula.