Suecia, Holanda y Finlandia anuncian deportaciones masivas de refugiados

La Voz LA VOZ | AGENCIAS

INTERNACIONAL

JESSICA GOW | Efe

Las autoridades de los tres países expulsarán a decenas de miles de personas con el consentimiento de la Unión Europea

28 ene 2016 . Actualizado a las 20:08 h.

El norte de Europa tiene una solución -bastante polémica- para atajar cuanto antes el problema de los refugiados. Mano dura. Después de la decisión de Dinamarca de confiscar todos los bienes de valor a los refugiados que lleguen a su territorio, los que han optado por decisiones de calado han sido Suecia, Holanda y Finlandia que ya han anunciado deportaciones masivas.

La primera en saltar ha sido Suecia, cuyo gobierno ya ha alertado de su decisión a sus compañeros europeos. El Ejecutivo sueco prevé que entre 60.000 y 80.000 personas que pidieron asilo durante el año pasado puedan ser expulsadas del país, una circunstancia alarmante si se tiene en cuenta que es el que más peticionarios per cápita recibe de toda la Unión Europea. Esta es la respuesta que Suecia ha tenido tras ser continuamente desoídas todas las solicitudes que desde hace un tiempo lleva demandando al resto de países de los Veintiocho.

Y parece que no hay vuelta atrás. porque el ministro sueco de Interior, Anders Ygeman, ya ha transmitido a las autoridades migratorias y a la Policía de su país que se preparen para un «reto muy grande». «En la medida en la que hemos recibido a muchos solicitantes de asilo en Suecia -163.000 en el 2015-, también aumentará la cifra de quienes vean rechazadas sus peticiones. Si la actual frecuencia se mantiene, se trataría de entre 60.000 y 80.000 personas», aseguraba Ygeman a la emisora pública Radio de Suecia. Y lejos de poner el grito en el cielo, la Comisión Europea ha abierto el paso a las autoridades suecas. Bruselas asume que Suecia está en todo su derecho de repatriar a los inmigrantes irregulares y además destacó que aplicar la política de retorno es clave para distinguir a estas personas de los demandantes de asilo en el marco de la crisis migratoria que actualmente vive Europa.

Pero Suecia no ha sido el único. De hecho hay quien ha dado un paso más allá. Holanda ni tan siquiera le pone cifra. Varios altos cargos del país se encerraron este jueves para discutir un plan que les permita devolver a todos los refugiados a Turquía, en un intento por frenar la masiva llegada de solicitantes de asilo a Europa. En una entrevista en el diario neerlandés Volkskrant, el líder del Partido Laborista, Diederik Samsom, ha propuesto una especie de canje por el cual la UE enviaría a los recién llegados a Turquía a cambio de que los dos millones de refugiados que ya están en suelo turco sean reubicados en los países miembro: «No puedes convencer a Turquía de readmitir a esta gente si no alivias la carga de refugiados actual», ha dicho Samson, explicando que el objetivo es hacer que el viaje por mar hacia Europa pierda sentido al dar a los solicitantes de asilo una vía segura para conseguirlo.

A ellos se ha sumado Finlandia, que calcula que expulsará del país a cerca de 20.000 de las 32.476 personas que solicitaron asilo en el 2015, ya que no cumplen los requisitos para obtener el estatus de refugiado. Esta cifra, apuntada a la cadena de televisión local MTV3 por la secretaria del Ministerio de Interior finlandés, Päivi Nerg, supone alrededor del 62 % de todas las solicitudes de asilo recibidas el pasado año, cuando llegaron a Finlandia nueve veces más refugiados que en el 2014. «En estos momentos estimamos que serán expulsados unos 20.000 solicitantes, aunque el número podría variar dependiendo de cuántos quieran regresar a su país voluntariamente», afirmó Nerg. Hasta la fecha, cerca de 4.000 personas que llegaron a Finlandia en 2015 han retirado su petición de asilo de forma voluntaria, por lo que deberán regresar lo antes posible a sus países de origen.