El chavismo premia a la jueza que condenó a Leopoldo López

pedro garcía otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

MIGUEL GUTIERREZ | efe

La oposición ve como una provocación el nombramiento de Susana Barreiros como defensora pública de los presos

11 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Apenas cuatro días después de ser desautorizado de manera categórica en las elecciones del domingo, y en su primera sesión tras los comicios, el Parlamento saliente, aún controlado por el chavismo, eligió a la Defensora Pública de Presos. Una noticia que sería de rutina si no fuera por el nombre de la elegida: nada menos que Susana Barreiros, hasta ahora juez 28 de Juicio de Caracas, provisional, y más conocida por haber sido quien sentenció al líder opositor Leopoldo López a 14 años de cárcel, en una decisión tan criticada nacional e internacionalmente como el propio juicio, calificado de «farsa» entre otros por el fiscal que llevó la acusación.

La Asamblea en funciones justificó su decisión en quien todavía es su presidente, Diosdado Cabello, quien afirmó que este Legislativo «sesionará lo que tenga que sesionar junto al pueblo». La decisión de la bancada chavista ha sido interpretada como una provocación si se considera que la primera propuesta de la próxima Asamblea será una Ley de Amnistía, que busca favorecer en primer lugar a López así como a los cerca de 80 detenidos políticos que hay en el país.

Nicolás Maduro, ha dicho en dos oportunidades que no aceptará dicha ley, pero tiene pocas probabilidades de frenarla, toda vez que la próxima Asamblea Nacional estará bajo control de la oposición, con una proporción de dos tercios lo que le da poder casi ilimitado. En su intervención, Cabello, quien pese a ser reelegido diputado ya no podrá repetir como presidente de la Asamblea, agregó que «el monstruo de Ramo Verde [por la cárcel militar en la que López está recluido] «tiene que asumir su responsabilidad por los 43 muertos en las protestas de 2014», a pesar de que ninguno de los delitos por los que está condenado López es el de homicidio. Opinión distinta a la suya tiene el diputado Hermes García, quien tomó la palabra en nombre la oposición. Calificó la designación de Barreiros como «una ofensa» y agregó que «esta abogada está fuertemente cuestionada en lo jurídico y en lo moral».

¿Qué validez tiene el nombramiento? José Ignacio Hernández, experto en Derecho Administrativo, declaró a La Voz que la designación de Barreiros puede durar poco en realidad. El artículo 11 de la Ley de la Defensa Pública Nacional señala que la mayoría de la Asamblea puede removerla, y no establece causales para ello.

Control del Supremo

Ayer, igualmente, el chavismo avanzó en la designación de 12 nuevos magistrados del Tribunal Supremo, que aspira a dejar nombrados antes de entregar al próximo Parlamento. «No aceptaremos ningún chantaje», dijo Cabello. «Esta Asamblea trabaja hasta el 4 de enero».

No acaban en estos enjuagues parlamentarios los desplantes a la oposición, ya que entre los diputados electos el pasado domingo hay un preso político. Se trata de Renzo Pietro, elegido como suplente por el estado Táchira, donde se produjeron las más violentas protestas contra el Gobierno de Maduro en 2014. Pietro, preso desde mayo del año pasado por estas protestas, pero en Caracas, ha sido, según afirmaron ayer sus abogados, sistemáticamente golpeado en la sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional, en Caracas, donde se encuentra recluido. Sus representantes legales agregaron que esas golpizas contra el joven de 24 años se han incrementado luego de que fuera diputado el domingo. «Es un castigo de despedida» que le están dando, afirma el dirigente político Alberto Franceschi.

Según Colpisa, con el escozor del batacazo todavía al rojo vivo, el presidente Maduro hizo autocrítica matizada en una asamblea popular frente al palacio de Miraflores pero aprovechó el auditorio entregado para amenazar con que habrá una convulsión social si la «revolución bolivariana sigue atascada». El mandatario atribuyó de nuevo su derrota a la «guerra económica» de la derecha y, remoloneando un poco, también a los «propios errores», la «burocracia y la corrupción que envolvieron las políticas revolucionarias».

«Nicolás nos invita a subir a un ring y ese no es nuestro interés»

«¿Cuál ha sido el mensaje de Nicolás en las últimas horas? Invita prácticamente a un ring, a una confrontación política. Como venezolanos debemos estar preocupados», denunció ayer el dirigente de la oposición Henrique Capriles. Según argumentó, «nosotros no ganamos la Asamblea Nacional para montarnos en un ring» y ese «no es nuestro interés». «Esta no es una Asamblea revanchista», agregó. En relación con los anuncios del Gobierno, de que rechazará las leyes que le envíe la mayoría opositora, el también gobernador del estado Miranda recordó que en Venezuela «no existe el poder de veto». Si el Ejecutivo no promulga las leyes que reciba de los diputados, «la directiva de la Asamblea Nacional tiene competencia para promulgarlas», advirtió.