EE.UU. se queda solo en su inesperado rechazo a levantar el embargo a Cuba

victoria toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Eduardo Muñoz Alvarez | EFE

El cambio sustancial en las relaciones entre los dos países desde diciembre pasado había alimentado la esperanza de que el voto de Washington este año fuera distinto

28 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El voto de Estados Unidos ayer en la ONU en contra de levantar el embargo a Cuba fue el mismo que el de cada año desde 1992, cuando Cuba presentó por primera vez la resolución, pero esta vez fue inesperado. El cambio sustancial en las relaciones entre los dos países desde diciembre pasado había alimentado la esperanza de que el voto de Washington este año fuera distinto, pero ni el acercamiento a la isla impulsado por Barack Obama ni su claro posicionamiento han sido suficientes. Eso sí, EE.UU. se quedó más solo que nunca en la ONU, acompañado únicamente por su eterno socio, Israel. Todos los 191 países restantes votaron a favor de la resolución presentada por Cuba.

Hace algo menos de un mes, poco antes de que Obama y Raúl Castro hablaran ante la Asamblea General de la ONU, se filtró que la Casa Blanca estaba evaluando la posibilidad de abstenerse en la votación de ayer, a pesar de que era evidente que EE.UU. no podía votar a favor de Cuba y en contra de sus propias leyes. Sin embargo, una abstención hubiera puesto contra las cuerdas al Congreso, que es el único que puede aprobar el fin del embargo.

Los republicanos contraatacaron calificando la posible abstención de traición de Obama a su propio país. La posible traición, a nadie se le escapaba, podía convertirse en una formidable herramienta electoral de los republicanos contra el partido del presidente, y en un año preelectoral. Los asesores de Obama también lo vieron así e intentaron negociar con La Habana para que este año no presentara la resolución.

Pero Cuba no cedió, porque también Castro necesita la resolución por motivos de política interna: es la fórmula para recordar a los cubanos que el responsable de la desastrosa economía de la isla es EE.UU. y no su propio Gobierno.

Otra alternativa que Washington intentó fue que La Habana cambiara el texto de la resolución y presentara una alternativa «amable» que reconociera ampliamente el esfuerzo de la administración Obama para mejorar las cosas entre ambos países. Pero tampoco esa posibilidad fue aceptada por los cubanos, que, como única concesión, añadieron al texto una referencia a los cambios que se han sucedido en los últimos meses, pero sin dejar de cargar, otra vez duramente, contra sus vecinos.

La Habana: 24 años pidiendo lo mismo

Aunque el embargo de EE.UU. contra Cuba comenzó en 1962, no fue hasta 1992 cuando La Habana presentó, por primera vez, una resolución ante la ONU pidiendo su fin. En aquella primera votación a Cuba no le fue del todo mal: 57 votos a favor, tres en contra (EE.UU., Israel y Rumanía) y 71 abstenciones. En pocos años, la mayoría de esas abstenciones se fueron convirtiendo en síes.

El año pasado, la resolución recibió 188 votos a favor, dos en contra, como siempre EE.UU. e Israel y tres abstenciones, de tres pequeños países insulares: Micronesia, Islas Marshall y Palau.

Aunque al final la votación de ayer no contó con la esperada abstención de EE.UU., pasara a la historia por el grito unánime de otros 191 miembros. El periódico oficial del Partido Comunista Cubano, Granma, titulaba celebraba el hito: «El mundo le da un NO rotundo al bloqueo».