Dilma Rousseff reforma su Gabinete para intentar salvar su presidencia

c. o. REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

EVARISTO SA | AFP

Las carteras se reducen drásticamente de 39 a 31 y el sueldo de los ministros se recorta un 10 %. Además, en el nuevo equipo gana protagonismo el Partido del Movimiento Democrático Brasileño 

03 oct 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Solo nueve meses después de comenzar su segundo mandato, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha aplicado una profunda remodelación del Gobierno con la finalidad de superar la grave crisis política y financiera que atraviesa. Además de por la drástica reducción de carteras (de 39 a 31) y del sueldo de los ministros (un 10 %) que impone la austeridad, los cambios presentan también una notable connotación cualitativa, por cuanto en su nuevo equipo ganará protagonismo su socio de gobierno, el Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), de centroderecha, a costa del maltrecho, por los escándalos de corrupción, Partido de los Trabajadores.

La jefa de Estado la presenta como una solución para mejorar la eficacia de la gestión y reducir el gasto público, pero los analistas ven en los cambios una estrategia para alejar el fantasma del impeachment. En este sentido, el cese de Aloizio Mercadante, brazo derecho de Rousseff, como jefe del Gabinete Civil de la Presidencia, supone un intento de suavizar la tensión entre el Ejecutivo y el Congreso, pero además era una antigua demanda del expresidente Luiz Inacio Lula da Silva y del PMDB, a cuyas presiones parece haber cedido Rousseff para salvar su mandato.

Refuerzo del PMDB

El lugar de Mercadante, que vuelve a Educación, lo ocupará Jaques Wagner, fiel aliado de Lula que estaba en Defensa. El desplazamiento de su primer ministro también lubricará las relaciones con el titular de Hacienda, Joaquim Levy, a cuyas propuestas de recorte de gastos se opone ferozmente Mercadante.

El PMDB, al que pertenecen el vicepresidente, Michel Temer, y los presidentes de las dos Cámaras, gana una cartera (y así pasa a tener 7), la de Salud. Un ministerio clave, ya que posee el presupuesto mejor dotado. Y con ello, Dilma debería asegurarse los votos de al menos 50 de los 66 diputados del PMDB, que serán claves para evitar el juicio político.