Rusia prepara el terreno en Siria para una ofensiva terrestre de tropas iraníes

r. p. REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

John McCain denuncia bombardeos rusos contra insurgentes entrenados por la CIA

02 oct 2015 . Actualizado a las 11:39 h.

Por segundo día, cazas rusos dejaron caer ayer sus bombas sobre objetivos insurgentes en Siria y, por primera vez, el Kremlin admitió que no solo está atacando al Estado Islámico, sino también a otros «grupos terroristas de una lista acordada» con Damasco. Los datos de las propias fuentes de seguridad sirias señalan que los objetivos fueron el Frente Al Nusra (filial de Al Qaida), el islamista Ahrar al Sham y otras pequeñas facciones moderadas. En definitiva, grupos que luchan contra el régimen de Bachar al Asad y el Estado Islámico, y que tienen el apoyo de EE.UU. y los países árabes. El senador John McCain, muy critico con la política de Obama en Siria, denunció que estaba en condiciones de «confirmar de forma absoluta» que fueron atacados grupos no islamistas financiados y entrenados por asesores de la CIA.

El principal objetivo de Rusia, según los analistas, es ayudar al régimen sirio a frenar a los insurgentes y fortalecer la posición de Damasco de cara a un todavía hipotético proceso de paz.

En ese objetivo, los cazas rusos solo estarían preparando el terreno para una ofensiva terrestre de tropas iraníes para ayudar al Ejército de Al Asad y a sus aliados de Hezbolá a recuperar el terreno perdido. En los últimos dos días, cientos de soldados iraníes han llegado a Siria con ese propósito y «llegarán más», según dos fuentes libanesas distintas citadas por la agencia Reuters. «Es posible que las operaciones terrestres se concentren en las zonas rurales de Idlib y Hama», avanzaron.

No se trataría de «asesores» iraníes como hasta ahora, sino de «soldados y oficiales» que han acudido «específicamente para participar en esta batalla», añadieron las fuentes.

Más de 50 aparatos, entre cazas SU-24M y Su-25 y helicópteros, participaron ayer en los bombardeos contra bases y arsenales terroristas en zonas montañosas de las provincias de Homs, Hama e Idlib, localizadas a través de drones, explicó el general Ígor Konashenkov, en su parte militar.

El presidente Vladimir Putin descalificó a los que le acusan de bombardear a civiles y lo tildo de «ataque informativo». «La primera noticia sobre víctimas entre la población civil apareció antes de que despegaran nuestros aviones», dijo .

La tensión de Estados Unidos y Rusia sigue incrementándose. El presidente François Hollande entró en la polémica sobre el objetivo de los ataques rusos, al señalar que «a quien hay que bombardear es al Estado Islámico, no a los otros». Rusia insiste en que no está atacando a los opositores al presidente Bachar al Asad y que sus objetivos son los mismos grupos yihadistas que los de Washington, en palabras de su ministro de Exteriores, Serguéi Lavrov.

El Pentágono insiste en señalar que la coalición que lidera contra el EI no ha reducido sus ataques en Siria. Pero la concentración de aviones en cielo sirio no hace pensar que sea así. Militares de EE.UU. y Rusia iniciaron ayer contactos para evitar encontronazos y accidentes.

Irak, a favor de que Moscú amplíe sus ataques aéreos a su territorio

Irak parece alejarse de EE.UU. al abrir ayer su primer ministro, Haider al Abadi, las puertas a que Rusia amplíe sus bombardeos al Estado Islámico en territorio iraquí, si bien aclaró que no ha formulado ninguna petición al respecto. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, señaló que no hay tales planes. «No estamos planeando ampliar nuestros ataques aéreos a Irak», dijo. «No fuimos invitados, no nos preguntaron y, como saben, somos gente educada. No vamos si no nos invitan», agregó desde Nueva York.

Sin embargo, en Moscú poco antes Iliá Rogachov, alto funcionario del Ministerio de Exteriores, aseguró que estudiaría la petición de Irak. «En caso de que haya suficientes motivos para ello se examinará su conveniencia política y militar», dijo.

Irán y Arabia Saudí

Irán saludó y manifestó su apoyo a la intervención rusa en Siria, mientras Arabia Saudí pidió a Rusia que ponga fin «inmediatamente» a los ataques aéreos en Siria, toda vez que estarían afectando a «víctimas inocentes» ajenas al Estado Islámico . También el canciller turco, Feridun Sinirlioglu ,expresó su «seria preocupación» por las «informaciones» que indican que los bombardeos afectaron a rebeldes opuestos al régimen de Al Asad y a civiles.