Tsipras defiende el tercer rescate y rechaza una coalición con los conservadores

Efe ATENAS

INTERNACIONAL

ALEXANDROS AVRAMIDIS | Reuters

El líder de Syriza asegura que las diferencias entre su partido y Nueva Democracia son muy significativas, «como el día y la noche»

07 sep 2015 . Actualizado a las 19:50 h.

El líder del partido izquierdista Syriza, Alexis Tsipras, defendió este lunes la firma del tercer rescate, aseguró que los conservadores de Nueva Democracia hubieran traído medidas más duras y rechazó indirectamente formar una alianza de Gobierno con ellos.

«El primer memorando (programa de rescate) obligó a medidas de ajuste por un total de 17.000 millones al año; el segundo, de 9.800 millones al año, y nuestro programa es de apenas 2.900 millones al año», dijo Tsipras, quien recordó que el primero lo firmaron los socialdemócratas del partido Pasok y el segundo, los conservadores de Nueva Democracia.

Tsipras hizo estas declaraciones en la tradicional rueda de prensa que ofrecen los líderes políticos durante su visita anual a la Feria de Salónica, que este año tiene lugar tan solo dos semanas antes de las elecciones anticipadas.

«Está claro que este acuerdo tiene dificultades y que debemos buscar medidas» que amortigüen algunos puntos, dijo Tsipras para insistir en que, pese a todo, las medidas «no tienen ni comparación» con las del primer y el segundo memorando y al menos dan «una perspectiva para la salida de la crisis».

«Puedo afirmar que lo peor pasó», sostuvo Tsipras, quien se mostró seguro de que su partido Syriza, que acaba de sufrir una dolorosa fractura al perder al ala más radical, se alzará con una clara victoria en las urnas y que el pueblo le otorgará un fuerte mandato que evitará que el Gobierno de izquierdas se convierta en un «paréntesis» en la historia.

«El pueblo decidirá si Syriza va a seguir gobernando y con quién. En realidad el dilema es si va a gobernar Syriza o Nueva Democracia», afirmó Tsipras, dando así indirectamente una negativa a la oferta del líder de Nueva Democracia, Vangelis Meimarakis, de forjar una gran coalición para «garantizar la permanencia» de Grecia en la eurozona.

El ex primer ministro griego sostuvo que cualquiera que quede como primera fuerza rozará la mayoría absoluta y, por tanto, podrá elegir con quién gobernar, dejando entrever que no será necesario recurrir a la segunda mayor fuerza, y que el ganador formará Gobierno y evitará una tercera cita con las urnas.

«Tenemos nuestro programa, reivindicamos la mayoría absoluta. Si no la conseguimos, el país tendrá un Gobierno, porque ninguno tomará la responsabilidad de provocar nuevas elecciones», sostuvo.

A su juicio, las diferencias entre Syriza y Nueva Democracia son muy significativas, «como el día y la noche», a pesar de que «Meimarakis intenta crear un clima de que todos son parecidos».

«Debemos dejar atrás las prácticas políticas del pasado y avanzar hacia el futuro», dijo el líder izquierdista para precisar que hay que poner fin al «clientelismo» y la «corrupción» que marcaron las décadas de gobiernos pasados.

Entre las diferencias fundamentales entre Syriza y Nueva Democracia, Tsipras resaltó el hecho de que el Gobierno de su antecesor, Andonis Samarás, pretendió hacer pensar que la deuda griega es sostenible, mientras que «nosotros conseguimos que se abra el debate» sobre su renegociación, dijo.

«Otro tema prioritario para nosotros es el tratamiento de las deudas morosas o la protección de los ingresos mas bajos», o el restablecimiento de la negociación colectiva, algo que, añadió, no fue prioridad del Gobierno conservador.

Tsipras insistió en que, a diferencia del su principal rival, el Ejecutivo de Syriza firmó un acuerdo tras haber negociado con firmeza que permitirá relanzar la economía gracias, entre otras medidas, a los 35.000 millones de euros del denominado plan Juncker.

En caso de que «ganen las fuerzas del pasado» -dijo-, Syriza seguirá defendiendo los «derechos de los más pobres».

A la pregunta de si no teme que pueda haber nuevamente una revuelta interna y otra fractura del partido en el momento en que haya que aplicar las leyes del rescate, Tsipras recalcó que «todos los que están en las listas del partido se comprometen a respetar el programa del partido» y que ya no hay «un partido dentro del partido».

Recalcó que su intención es continuar defendiendo la permanencia de Grecia en la eurozona, «porque si alguien está dispuesto a salir del euro, se opondría a todo acuerdo», dijo en alusión al programa de Unidad Popular, la formación escindida de Syriza, que defiende la abolición de los memorandos y la vuelta a la moneda nacional. «Syriza seguirá con un grupo parlamentario más compacto, con un programa más compacto y sin peligro de ser acusados de planes ocultos de salida del euro», apuntó.