La tensión migratoria en la frontera común enfrenta a Francia e Italia

María Signo ROMA / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

París afirma que es Roma la que tiene que ocuparse de los inmigrantes

16 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La tensión entre Francia e Italia se elevó ayer a causa de los inmigrantes que desde hace días están bloqueados en la frontera común, ante las declaraciones del ministro del Interior galo, Bernard Cazeneuve, en las que afirmó que es el Gobierno de Roma quien tiene que ocuparse de ellos. En declaraciones a la radio BFMTV, recordó a Italia que, según el Tratado de Dublín, las solicitudes de asilo tienen que tramitarse en el primer país que pisa el refugiado.

Los inmigrantes esperaban ayer la apertura de la frontera, tras el fin del cierre a causa de la pasada cumbre del G7. Pero eso no ocurrió. Cazeneuve aseguró ayer que su país no ha suspendido el espacio Schengen de libre tránsito ni ha cerrado su frontera con Italia, sino que sencillamente se ha limitado a aplicar controles más férreos. «Desde principios de año hemos tenido 8.000 ingresos por la frontera y hemos devuelto a Italia a 6.000 personas», dijo, antes de señalar algo obvio desde hace meses: «Nos enfrentamos a un fenómeno migratorio cuyo alcance no tiene parangón comparado con años anteriores».

La respuesta del jefe de Gobierno italiano, Matteo Renzi, no se hizo esperar: «Europa tiene la obligación de afrontar conjuntamente el problema de los inmigrantes. Este es el plan A. La postura de fuerza de algunos ministros de otros países va en la dirección opuesta». Y añadió que si no hay una Europa solidaria, Italia aplicará «un plan B».

Sobre el plan B italiano, la portavoz de la Comisión Europea, Natasha Bertaud, declaró ayer no conocer su contenido e insistió en que el plan presentado por Bruselas para redistribuir 24.000 demandantes de asilo en Italia y 16.000 en Grecia es «equilibrado». Bertaud expresó su esperanza de que hoy reciba el «apoyo político» necesario de los ministros europeos del Interior durante la reunión en Luxemburgo. De momento la Comisión está «verificando» la situación en las fronteras de Francia, Austria y Suiza.

La prensa especula que entre las medidas que podría contener el plan B de Renzi está la concesión de permisos temporales para permitir a los inmigrantes circular por toda Europa, que los barcos de la operación Tritón descarguen a los rescatados en el mar en sus propios países e incluso la ruptura por parte de Roma del embargo a Rusia.

La situación en el puerto de Ventimiglia continúa tensa con fuerzas de la Gendarmería francesa y de los Carabineros italianos desplegadas. Los inmigrantes que desde hace días duermen en la escollera, siguen su protesta contra París, mientras aumenta cada día el número de personas que esperan pasar la frontera y pasar a Francia.