Los aspirantes piden el voto con chalecos antibalas

natalia ramos MORELIA / DPA

INTERNACIONAL

04 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Hipólito Mora ha hecho campaña para diputado federal en México con chaleco antibalas, escolta y una camioneta blindada rumbo a las elecciones legislativas y regionales del domingo. «El crimen organizado lleva mucho tiempo queriéndome asesinar, pero aquí estoy», dice el exjefe de los autodefensas de La Ruana, de 59 años. En Michoacán, la inseguridad ha marcado la campaña electoral.

Mora va por una diputación federal por el distrito de Apatzingán con el partido Movimiento Ciudadano. En su campaña, a pie y de casa en casa, tomó algunas precauciones, como anunciar en Facebook con poca anticipación los lugares donde estaría o evitar ciertas comunidades.

Algunas zonas son consideradas «focos rojos», como la región de Tierra Caliente o los límites con el estado de Jalisco. La sombra del crimen no ha dejado de estar presente. Tuvo su máxima expresión con el asesinato el 14 de mayo en Yurécuaro del candidato a alcalde Enrique Hernández, del partido de izquierda Morena. El también exlíder de autodefensas en la zona agrícola de Michoacán recibió desde un vehículo varios disparos mientras celebraba un mitin.

El 23 de mayo, en Tanhuato otro suceso sacudió a Michoacán con la muerte de 42 presuntos miembros del cartel Jalisco Nueva Generación y un policía durante una operación por la invasión de un rancho por parte de personas armadas.

A partir del 2013 en la región de Tierra Caliente se constituyeron los grupos de autodefensa, integrados por ciudadanos dispuestos a suplir la falta de seguridad con sus propias armas. Pero algunos de sus miembros han sido acusados de estar vinculados al crimen organizado o de estar involucrados en enfrentamientos con muertos. El propio Mora fue arrestado dos veces por esta causa, aunque fue liberado por falta de pruebas.

Además de la violencia, la credibilidad en los políticos es otro factor de inestabilidad. En Michoacán, en el 2012 asumió como gobernador Fausto Vallejo, del Partido Revolucionario Institucional (PRI, en el poder), pero tuvo que dejar el cargo por salud. Su suplente fue encarcelado por colaboración con los Templarios. También uno de los hijos de Vallejo está investigado. Ahora gobierna Salvador Jara, un académico sin partido.