Saturación de aspirantes en las primarias republicanas

victoria toro REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Fiorina es la primera mujer republicana con aspiraciones a pelear la candidatura.
Fiorina es la primera mujer republicana con aspiraciones a pelear la candidatura. BRENDAN SMIALOWSKI | AFP

Ayer presentaron sus propuestas la primera mujer en las filas conservadoras y el eminente neurocirujano negro Ben Carson

05 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Ben Carson y Carly Fionrina anunciaron ayer que intentarán convertirse en los candidatos republicanos para las próximas presidenciales y Mike Huckabee tiene previsto hacerlo hoy.

Estas nuevas incorporaciones aportan diversidad a las concurridas primarias del partido conservador. Ben Carson es un eminente y famoso neurocirujano afroamericano retirado y Carly Fiorina ha llegado, en su carrera como alta ejecutiva de compañías tecnológicas, a ser CEO de Hewlett Packard. Ninguno de los dos tiene experiencia en cargos públicos. Mike Huckabee fue gobernador de Arkansas y este será su segundo intento por lograr convertirse en el candidato conservador.

Carson, Fiorina y Huckabee se suman a los otros tres conservadores que ya han hecho oficial su participación en las primaras: Ted Cruz, Rand Paul y Marco Rubio. Se espera para pronto la entrada en contienda de los favoritos, Jeb Bush, exgobernador de Florida, y Scott Walker, gobernador de Wisconsin.

Los estrategas republicanos destacaban ayer la diversidad de los candidatos, lo que contradice, según ellos, la imagen de uniformidad que se achaca habitualmente al partido. Pero lo cierto es que ni Carson, ni Fiorina ni Huckabee tienen muchas posibilidades de alcanzar la nominación. Este último es el mejor situado en las encuestas, con un 8 % de intención de voto, seguido por Carson con un 4,8 % y Fiorina (1 %).

La respuesta a por qué se presentan con unas estimaciones tan bajas pueden ser varias. En el caso de Carson y Fiorina podría ser que, si superan con dignidad las primeras votaciones de las primarias, tendrían opciones de convertirse en interesantes candidatos a la vicepresidencia y formar parte de la papeleta del republicano que obtenga la victoria. Los dos son bastante conocidos entre los estadounidenses y tienen a su favor su diversidad: Carson podría atraer el voto negro y de las minorías y Fiorina, como mujer, podría servirle al candidato conservador para competir con la casi segura vencedora de las primarias demócratas, Hillary Clinton.

Una historia de superación

Ben Carson tiene 50 doctorados honoris causa y la Medalla de la Libertad.
Ben Carson tiene 50 doctorados honoris causa y la Medalla de la Libertad. BILL PUGLIANO | AFP

La del aspirante republicano Ben Carson es una historia de superación personal digna de ser llevada al celuloide. Se crio en Detroit, junto con un hermano mayor que él, con los escasos recursos de una madre soltera que abandonó la escuela con 13 años y trabajaba como limpiadora sin poder, muchos días, siquiera ver a sus hijos. Con unas pésimas calificaciones y mucho mal genio, las estadísticas no se inclinaban precisamente a su favor.

Hasta que el genio que se desató fue el de su madre y, además de reducir las horas de televisión, obligó a sus hijos a leer dos libros a la semana, que sacaban de la biblioteca pública, y a escribir redacciones que ella misma leía a duras penas. El joven Benjamin empezó a destacar en el colegio. Con una beca y trabajos de verano, se licenció en Psicología en Yale y estudió Medicina en Míchigan. A los 33 años se convirtió en el jefe más joven de la unidad de neurocirugía pediátrica del Hospital Johns Hopkins.

Como médico escribió una historia de éxitos, como la primera separación de siameses unidos por la cabeza, en 1987, y la primera operación intrauterina de un gemelo hidrocefálico.

En el 2009 se jubiló y se retiró a Florida, pero en el 2013 irrumpió en política criticando con dureza, sentado a su lado, la reforma sanitaria de Obama. Profundamente conservador en lo social, sus opiniones le han traído problemas, como cuando afirmó que la homosexualidad es una elección o la comparó con la pedofilia, y es un firme defensor del creacionismo. Aunque se disculpó en varias ocasiones por sus afirmaciones, ayer, al anunciar su candidatura, lo advirtió: «No soy políticamente correcto».

El Carson Scholars Fund repartió ya 6.200 millones de dólares a estudiantes brillantes, y, convencido de la importancia de la educación para salir adelante, abrió salas de lectura en todo el país.