La Fiscalía abre una investigación sobre el espionaje de Alemania a socios de la UE

La Voz BERLÍN / COLPISA

INTERNACIONAL

JOHN MACDOUGALL

El ministerio público trata de averiguar sobre todo si  «existe un principio de sospecha de que se cometió un delito»

02 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

El nuevo escándalo de espionaje en Alemania que implica a la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense y a los Servicios Federales de Inteligencia (BND) alemanes, estos últimos como instrumento al servicio de los primeros, puede tener consecuencias ante los tribunales. La Fiscalía Federal germana ha abierto ya una investigación. Se trata de averiguar sobre todo si «existe un principio de sospecha de que se cometió un delito», señaló ayer un portavoz del ministerio público.

En el nuevo capítulo de la actuación irregular de la NSA en Alemania parece confirmarse que esta agencia utilizó durante años el centro de escuchas del BND en la localidad bávara de Bad Aibling para intervenir comunicaciones telefónicas y de Internet. Para ello suministraba a los servicios secretos germanos palabras clave, los llamados selectores, a la hora de peinar esas comunicaciones. El BND advirtió al parecer hace años a la Cancillería de las escuchas irregulares y de dudosa legalidad encargadas por los agentes estadounidenses.

Pero hasta que la comisión parlamentaria responsable de investigar las actividades de la NSA en Alemania no insistió ante la oficina de Merkel para recibir informaciones precisas, el Gobierno no se preocupó de averiguar. Todo apunta a que desde el pasado marzo cuenta con información precisa que se resiste a revelar.

También en Austria

El dominical Bild am Sonntag ha adelantado que la NSA no solo ha utilizado al BND para realizar escuchas en París y Bruselas, sino también en Viena para espiar las comunicaciones del Gobierno austríaco.

Ante las dimensiones que está alcanzando el escándalo, que afecta a la imagen de la canciller Angela Merkel, y a su titular de Interior Thomas de Maizière, la secretaria general del SPD, Yasmin Fahimi, puso ayer el grito en el cielo. La dirigente del partido que gobierna en coalición con los conservadores afirmó que «la supervisión de la Cancillería Federal en el BND parece haber fracasado escandalosamente» y lanzó una seria advertencia. «Si las acusaciones se confirman, no descarto que haya consecuencias personales», dijo.