Miliband culpa a Cameron del drama en el Mediterráneo por el fracaso en Libia

Rita a. Tudela LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

ADRIAN DENNIS | AFP

El primer ministro definió la acusación del laborista como «insensata» y de querer ganar votos esta semana a costa de la tragedia de los inmigrantes ahogados

25 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La política exterior se coló ayer en la campaña electoral británica al achacar líder laborista, Ed Miliband, al Gobierno de David Cameron parte de la responsabilidad en la crisis de inmigrantes en el Mediterráneo por su fracaso y sus errores de cálculo en Libia, tras su participación en la intervención militar que llevó a la caída de Muamar Gadafi.

Para Miliband, Cameron «asumió equivocadamente que las instituciones de Libia iban a evolucionar y transformarse por si solas» tras la caída de Gadafi. «La tragedia podía haberse previsto y debería haberse evitado», añadió.

«David Cameron ha presidido la mayor pérdida de influencia de nuestro país en una generación», sentenció en un mitin en Londres, para señalar que «es hora de rechazar el aislacionismo».

Si miramos hacia atrás, en el 2011 Miliband votó a favor de que la ONU autorizase los ataques aéreos contra Gadafi. Se trata de una intervención cuyos fallos de planificación posteriores han llevado al caos actual en el país, según Miliband, para quien el primer ministro tory no solo «se alejó del mundo», sino que además «llevó a la pérdida de influencia en una generación».

Acusación insensata

Cameron definió la acusación del laborista como «insensata» y de querer ganar votos esta semana a costa de la tragedia de los inmigrantes ahogados. Para los conservadores, Miliband había dado a entender que Cameron era un asesino por no involucrarse más en la situación libia.

«He aprendido como premier que es muy importante en un mundo peligroso e incierto que se muestre claridad, coherencia y fuerza en estos temas de política exterior. La gente va a mirar estas declaraciones imprudentes y van a llegar a sus propias conclusiones», dijo Cameron.

En la misma línea, el líder liberaldemócrata, Nick Clegg, reconoció que «apuntarse tantos políticos» gracias a una tragedia humana» era «muy desagradable». Pero quizás el más duro fue William Hague, el exministro de Exteriores, quien lo acusó de hacer comentarios oportunistas y reprochándole que la política exterior «no es algo que solo se puede descubrir 13 días antes de la jornada electoral». Criticó que sea la primera vez en cinco años en que Ed Miliband se preocupe por la política exterior.