Irán crispa la situación al enviar dos buques de guerra frente a las costas de Yemen

La Voz REDACCIÓN / LA VOZ

INTERNACIONAL

Por primera vez desde el inicio de la ofensiva  de Arabia Saudí contra los rebeldes chiíes hutíes, Teherán impone su presencia en el país

09 abr 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La república chií de Irán elevó la escalada de tensión con su alter ego en la región, el reino suní de Arabia Saudí. Por primera vez desde el inicio de la ofensiva saudí contra los rebeldes chiíes hutíes, Teherán impone su presencia frente a las costas de Yemen al enviar dos buques de guerra al golfo de Adén.

Oficialmente, según explicó el almirante Habibolá Sayari, los destructores Alborz y Bushehr han partido en una misión contra la piratería internacional. Los barcos iraníes se encargarán de patrullar el golfo de Adén y el mar Rojo, una de las principales rutas de comercio marítimo entre Oriente Medio y Europa. Teherán ha desplegado sus naves a pesar del bloqueo aéreo y marítimo que la coalición árabe ha impuesto sobre Yemen para garantizar el éxito de su ofensiva.

Washington aumentó ayer su participación en la campaña saudí en Yemen entregándole armamento y apoyo en materia de inteligencia, según anunció el subsecretario de Estado, Antony Blinken. El Pentágono ha alertado de que Al Qaida está sacando provecho del conflicto en Yemen. La semana pasada, la red terrorista se hizo con el control de Mukala, en el sudeste yemení.

El ministro de Exteriores, Mohamed Javad Zarif, intentará evitar que Pakistán se una a la coalición que bombardea Yemen durante su visita a Islamabad. El primer ministro Nawaz Sharif aseguró que Pakistán «no tenía prisa» por decidir y que había en marcha negociaciones entre Irán y Turquía.

Las agencias humanitarias luchan por llegar hasta los civiles atrapados en el conflicto. Los primeros barcos de Médicos Sin Fronteras y la Cruz Roja llegaron ayer al puerto de Adén.