Julian Assange impone condiciones para que la Fiscalía sueca le tome declaración en Londres

EFE GINEBRA

INTERNACIONAL

FABRICE COFFRINI | AFP

Baltasar Garzón, jefe del equipo jurídico que representa al fundador de Wikileaks pide saber de qué se le acusa y el contenido del procedimiento

23 mar 2015 . Actualizado a las 19:01 h.

El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, acepta que la Fiscalía sueca le tome declaración en la embajada de Ecuador en Londres por los dos supuestos casos de delito sexual que se le atribuyen, siempre y cuando se cumplan varios requisitos, «detalles que tienen que ser organizados con los distintos Estados -Reino Unido, Ecuador y Suecia-, y cómo se hará para que esto pueda ocurrir», según dijo el propio activista a través de teleconferencia.

«Siempre dije que podían venir si querían hablar. Esa oferta siempre estuvo sobre la mesa. Estoy muy contento de que la fiscal aceptó esa oferta», dijo desde la embajada ecuatoriana, donde permanece refugiado, el fundador de Wilkileaks, el portal responsable de la filtración de miles de documentos secretos de EE. UU., que participó en un acto paralelo al Consejo de Derechos Humanos de la ONU organizado, precisamente, por la misión de Ecuador.

Julian Assange está refugiado en la embajada ecuatoriana de Londres desde junio de 2012 tras ser acusado de cuatro delitos sexuales contra dos mujeres, por temor a ser extraditado a Estados Unidos.

En el evento paralelo también participó el ex juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón, que ejerce de jefe del equipo jurídico que representa a Assange y que especificó cuáles son los requisitos que deben darse para que el interrogatorio pueda tener lugar: «Primero, la fiscal no tendría que consultar si queremos que vaya o no. Ella tiene que decidir si va o no va. En ningún país del mundo se le pregunta a un imputado si quiere que se le tome declaración o no. Se va, se le informa de sus derechos y comienza», explicó Garzón, que añadió que «si la pregunta es esa, ¿quieren ustedes que se haga esa diligencia? La respuesta es sí con carácter general».

«Pero lo que sí que decimos», continuó Garzón, «es que como garantía de derecho, díganos de qué se nos acusa; díganos el contenido del procedimiento, porque después de cuatro años y medio de proceso sin haber tenido acceso a ningún elemento del mismo, no podemos seguir a ciegas», consideró en referencia a los cuatro años y medio que han pasado desde que se le atribuyeron los delitos sexuales a Assange, durante los cuales la Fiscalía sueca no ha presentado ningún cargo en su contra.

Garzón también dejó claro que para que el interrogatorio pueda tener lugar, primero deben conocer el contenido del informe que el fiscal general de Suecia debe transmitir al Tribunal Supremo de ese país sobre por qué se ha tardado cuatro años y medio en interrogar a Assange y que, «cumplidos esos requisitos, no habrá ningún inconveniente para la declaración, lo único que estamos pidiendo es que se cumpla la ley», puntualizó.

La Fiscalía sueca se había negado hasta ahora a interrogar a Assange en Londres con el argumento de que las leyes suecas exigen que el interrogado esté en el país durante la investigación preliminar de este tipo de delitos, algunos de los cuales prescriben en agosto próximo, por lo que la solicitud, ahora, por parte del ministerio público sueco está motivada, según el ex juez español, por el hecho de que se está pendiente de que el Tribunal Supremo sueco resuelva sobre la solicitud de revocación de la orden de detención por delitos sexuales.

De todas formas, para que esta declaración pueda tener lugar, Suecia debería coordinar sus acciones con las autoridades británicas y ecuatorianas, siempre y cuando la ley sueca lo permita, dado que el interrogatorio supuestamente no se hará a través de comisión rogatoria, como es lo usual.

En su alocución, el periodista y editor recordó que hoy se cumplen 1.566 días desde su detención en Londres, y 1.006 días desde que está refugiado en la embajada de Ecuador, un tiempo durante el cual «no se ha interpuesto ningún cargo contra mi. No he podido declarar. No he tenido acceso a mi dossier, y yo siempre he estado a disposición de la Justicia. La pena es el proceso», concluyó.