La Casa Blanca advierte del efecto «destructivo» del discurso de Netanyahu en el Congreso

Victoria Toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

NIR ELIAS | REUTERS

El primer ministro israelí va a dedicar su discurso ante los legisladores a Irán, el asunto por el que se ha deteriorado su relación con el presidente estadounidense

26 feb 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

«Destructivo», así es como definió Susan Rice, la principal asesora de Barack Obama, el efecto que tendrá el discurso que dará Benjamín Netanyahu la próxima semana en el Congreso de EE.UU. Tras esas palabras y cuando parecía que el enfrentamiento entre el primer ministro israelí y la Casa Blanca no podía ir más allá, Netanyahu rechazó la invitación de dos senadores demócratas para un encuentro.

Es un hecho sin precedentes que un líder de Israel se enfrente sin ningún paliativo al inquilino de la Casa Blanca, su principal aliado. Y más cuando a Obama le quedan dos años de presidencia.

El origen de este desacuerdo está en la invitación que el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano John Boehner, hizo a Netanyahu para que durante su visita a Washington hablara ante el Congreso. El israelí aceptó, a pesar de que ya sabía que la invitación de Boehner no contaba con la aprobación de la Casa Blanca, que acusó a los republicanos de actuar al margen del protocolo habitual.

Hace semanas que Obama confirmó que no se iba a reunir con Netanyahu, argumentando que no es perceptivo teniendo en cuenta que las elecciones israelíes están a la vuelta de la esquina.

Pero la realidad es otra. Benjamín Netanyahu va a dedicar su discurso ante los legisladores a Irán, el asunto por el que se ha deteriorado su relación con el presidente estadounidense. El líder israelí está en contra de cualquier acuerdo nuclear con Teherán. Su discurso va a ser una crítica a la política exterior de Obama y de apoyo a los republicanos.

Netanyahu hablará solo ante los republicanos porque la mayoría de los demócratas, entre ellos el vicepresidente Joe Biden y el jefe de la diplomacia John Kerry, ya han anunciado que no estarán presentes. Como tampoco lo estarán los representantes de varios Estados árabes a los que la embajada israelí había invitado.

Lo que se desconoce aún el impacto que la decisión de Netanyahu tendrá en las relaciones entre su país y EE.UU. si él gana las elecciones que en ese caso van a ser muy, muy complicadas.