Rafael Correa asegura que la situación de Assange está en manos de Inglaterra

EFE GUATEMALA

INTERNACIONAL

Considera que todo «se podría resolver mañana si el Reino Unido establece un salvoconducto para que pueda salir del país»

19 ago 2014 . Actualizado a las 22:47 h.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró hoy que la situación diplomática del fundador del portal WikiLeaks, Julian Assange, se encuentra en manos de Inglaterra.

«La situación de Assange se podría resolver mañana mismo si el Reino Unido establece un salvoconducto para que pueda salir del país», dijo Correa durante una rueda de prensa en Guatemala, donde se encuentra para participar en un foro regional.

El fundador de WikiLeaks, de 43 años y nacido en Australia, se refugió en la embajada de Ecuador en Londres (Inglaterra) en 2012 tras la concesión de asilo político por parte del Gobierno de Correa.

La organización de Assange ha divulgado millones de documentos secretos, entre ellos varios cientos de miles del Pentágono estadounidense.

El director de WikiLeaks huyó de Suecia en 2010, donde acababa de solicitar permiso de trabajo y residencia, tras iniciar la Fiscalía de ese país un doble proceso contra él por dos denuncias de violación y abuso sexual.

El 7 de diciembre de ese mismo año Assange se entregó a Scotland Yard en Londres y en 2011 un juez londinense aprobó su extradición.

El 19 de junio de 2012, después de que la Justicia británica ratificara la autorización de su extradición, Assange solicitó asilo en la embajada ecuatoriana en Londres, donde permanece desde entonces.

«Imaginen si esto hubiera pasado en Ecuador. Pero como es en Europa, no pasa nada», subrayó el mandatario sudamericano.

Correa también habló acerca de «una doble moral internacional» por juzgar a Assange por filtrar documentos a través de WikiLeaks y no a los medios estadounidenses que publicaron las informaciones.

«Assange ni siquiera está acusado en Suecia. La declaración a las autoridades suecas puede ser tomada por vídeo, pero no lo quieren hacer», concluyó el presidente ecuatoriano.

El australiano aseguró ayer que «pronto» abandonará la embajada de Ecuador, pero no dio más detalles.

Londres, por su parte, se ha negado a darle un salvoconducto diplomático que le permitiera abandonar la sede de la embajada en Inglaterra para viajar a Quito.