El presidente chino destaca la importancia estratégica de las relaciones con Caracas

Pedro García Otero CARACAS / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Acuerda con su homólogo venezolano intensificar la cooperación financiera

22 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.

El presidente de China, Xi Jinping, afirmó en Venezuela que las relaciones entre ambos países constituyen una «asociación estratégica integral», que convertirá al país sudamericano en «socio privilegiado» del gigante asiático, muy activo en los últimos años en áreas de tecnología, materias primas y otros en Venezuela.

Xi culminará hoy en Cuba su segunda visita a Latinoamérica desde que se convirtió en presidente de China, hace 17 meses; en la anterior visitó México, Costa Rica y Trinidad y Tobago; pero en esta gira hace énfasis en Gobiernos que están más cercanos ideológicamente al régimen comunista de Pekín, como Brasil, Argentina, Venezuela y Cuba, y que además tienen problemas económicos.

Contenidos desconocido

En Venezuela, AVN, la agencia de noticias oficial, señala que entre China y Venezuela se han suscrito 450 acuerdos desde el año 2004, pero el contenido de la mayoría de ellos se desconoce.

«Viviendas, alimentos, apoyo a las fuerzas armadas, fábricas de electrodomésticos», afirmó el segundo hombre del régimen, Diosdado Cabello, sin entrar en detalles. Nicolás Maduro, afirmó, por otra parte, que «estos compromisos con China no son onerosos, porque se pagan con petróleo», algo que ha sido muy criticado, por entenderse que China estaría llevándose, tras los convenios firmados, 540.000 barriles diarios, de una producción de unos 2,7 millones de barriles al día.

Xi anunció en Argentina que creará un fondo de unos 15.000 millones de euros para el financiamiento de infraestructuras en los países de la Comunidad de Estados de Latinoamérica y el Caribe (Celac).

El presidente de China, Xi Jinping, afirmó en Venezuela que las relaciones entre ambos países constituyen una «asociación estratégica integral» que convertirá al país sudamericano en «socio privilegiado» del gigante asiático, muy activo en los últimos años en áreas de tecnología, materias primas y otros en Venezuela. «Estamos de acuerdo en seguir promoviendo la protección mutua de las inversiones, intensificar la cooperación financiera», añadió Xi para resumir el tipo de acuerdos firmados.

Xi culminará hoy en Cuba su segunda visita a Latinoamérica desde que se convirtió en presidente de China, hace 17 meses. En la anterior visitó México, Costa Rica y Trinidad y Tobago, pero en esta gira hace énfasis en Gobiernos que están más cercanos ideológicamente al régimen comunista de Pekín, como Brasil, Argentina, Venezuela y Cuba, que también tienen algo en común: comienzan a (o llevan tiempo) presentando problemas económicos.

China participa también del llamado banco de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica), que, con un capital de 37.000 millones de euros, busca «convertirse en una alternativa a los organismos multilaterales especulativos», según el presidente del capítulo venezolano del Parlamento Latinoamericano, Carolus Wimmer.

«El banco de los BRICS es una alternativa en la que el resto del mundo puede tener voz ante el Fondo Monetario Internacional y la Organización Mundial de Comercio, controlados por EE.UU. y un puñado de países ricos durante 70 años», afirma Mark Weisbrot, del Centro de Investigación en Política y Economía.

China ya es el principal socio comercial de Brasil, el país más importante de la región, de Chile y de Perú, y tiene una presencia creciente en países de la fachada atlántica, como Argentina o Venezuela. Sin embargo, hay aumenta la preocupación por la calidad de ese comercio, centrado en la extracción de materias primas, han señalado analistas.