El ISIS reivindica el atentado suicida en un hotel de Beirut

Europa Press

INTERNACIONAL

Este fue el tercer atentado bomba en cinco días en Líbano

27 jun 2014 . Actualizado a las 17:54 h.

El terrorista suicida saudí muerto en una redada de las fuerzas de seguridad libanesas formaba parte del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), según un comunicado publicado este viernes que los responsables de seguridad de Líbano aseguran estarse tomando en serio.

Tres miembros de las fuerzas de seguridad resultaron heridos cuando irrumpieron en el hotel Duroy de Beirut y el sospechoso hizo detonar sus explosivos, lo que provocó su muerte y heridas a un cómplice.

Este fue el tercer atentado con bomba en cinco días en Líbano, que ha estado golpeado por la violencia relacionada con el conflicto en la vecina Siria y en Irak, países ambos que combaten a rebeldes suníes.

Los suníes libaneses apoyan a los rebeldes que buscan derrocar al presidente sirio, Bashar al Assad, un alauí, mientras que el partido-milicia chií Hezbolá ha enviado combatientes al país vecino para apoyarle.

«Dos leones del Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), que se infiltraron en la ciudad de Beirut en el Hotel Duroy, se enfrentaron a un grupo del servicio de Seguridad General leales al Partido de Satán», reza el comunicado, en referencia a Hezbolá, que significa Partido de Dios en árabe.

«Le decimos al Partido de Satán y su agente, el Ejército libanés, que esta es la primera lluvia y que hay cientos de personas que buscan el martirio, que aman la sangre de los negacionistas (chiíes)», añade.

El presunto anuncio por parte del ISIS se produce tres días después de una declaración en nombre de las Brigadas Abdulá Azzam, vinculadas a Al Qaeda, que -sin reivindicar directamente la responsabilidad de los atentados del viernes y el lunes- advirtió de más ataques contra objetivos chiíes en Líbano.

El ministro del Interior libanés ha señalado que el suicida saudí que se inmoló el miércoles planeaba atacar otro objetivo, identificado por fuentes de seguridad como un concurrido restaurante chií en el sur de Beirut.

Crisis política

Los temores de seguridad en Líbano se han visto fomentados también por la parálisis política. El país lleva casi un mes sin presidente por la imposibilidad de que el bloque político «14 de Marzo», liderado por los suníes, y el bloque «8 de Marzo», liderado por Hezbolá, lleguen a un acuerdo.

El gran mufti Mohamed Rashid Qabbani, la principal autoridad religiosa suní del país, ha instado este viernes a los políticos a poner fin a sus disputas.

«Líbano sin un presidente es un país sin cabeza», ha subrayado, advirtiendo de que la lucha sectaria amenaza de nuevo a un país que vivió una guerra civil entre 1975 y 1990. «Los acontecimientos en los últimos años han aumentado los odios y rencores en los corazones de todos los libaneses, y no es ningún secreto que (...) una lucha repentina se ha convertido en una posibilidad real», ha añadido.