En este sentido, el decano del colegio de abogados de París, Pierre-Olivier Sur, anunció que se dirigirá al presidente, François Hollande, para mostrarle su desaprobación por estas escuchas que consideró «violentas y desproporcionadas». «Es gravísimo pinchar el teléfono móvil de un abogado», dijo en la emisora «Europe 1» el decano, que reclamó una «justicia independiente».