Una organización religiosa australiana «alquiló» niños a pederastas

Efe

INTERNACIONAL

Una comisión investiga los abusos sexuales del «Ejército de Salvación» entre 1966 y 1977

30 ene 2014 . Actualizado a las 09:43 h.

Niños al cuidado de una organización cristiana australiana fueron «alquilados» a pederastas, según denunció hoy un testigo ante la comisión que investiga los abusos sexuales de menores cometidos en instituciones del país.

La comisión, que analiza la gestión del «Ejército de Salvación» en cuatro de sus centro entre 1966 y 1977, se centró en el hogar de Bexley que la organización de beneficencia tiene en Sídney donde la Policía investiga presuntos abusos a menores desde 1990. El inspector Rick Cunningham explicó el caso de un hombre, identificado como F.V., que en 1974 denunció a la Policía cómo el superintendente de Bexley, Lawrence Wilson, le presentó a una mujer vestida con el uniforme de la organización acompañada de un hombre.

La pareja se llevó a casa al entonces niño y lo violaron, una agresión que F.V. denunció a Wilson, quien ignoró la queja y azotó varias veces al menor como represalia, declaró Cunningham según informó la cadena ABC.

Al ser preguntado por los abogados del «Ejército de Salvación» sobre la existencia de una red de pederastas en la casa de acogida, Cunningham dijo que «la información de varios antiguos residentes es que iban a casas durante los fines de semana, que recibían visitas en Bexley».

Las pruebas dadas por F.V. derivaron en una imputación contra Wilson por sodomía, agresión común y asalto indecente, cargos de los que fue exculpado en 1997, 11 años antes de su muerte.

En la comisión, que hasta la próxima semana analiza al «Ejército de Salvación», también se acusó a trabajadores de la organización cristiana y a internos de mayor edad de abusar sexualmente de internos más jóvenes.

La creación de esta comisión fue anunciada en noviembre de 2012 después de que la Policía de Nueva Gales del Sur acusara a la Iglesia católica de encubrir casos de pederastia presuntamente organizada, tratar de silenciar las investigaciones y de destruir pruebas cruciales para evitar procesos judiciales.

La comisión de seis miembros comenzó las audiencias en abril y deberá emitir un informe a finales de junio, antes de concluir su trabajo en diciembre de 2014.