El Parlamento portugués saca adelante los presupuestos entre gritos de «dimisión»

Efe

INTERNACIONAL

MIGUEL A. LOPES

Un diputado de las formaciones que comparten el Gobierno se ha desmarcado de la postura oficial y ha votado en contra de las cuentas, que incluyen nuevos recortes a pensionistas y funcionarios

26 nov 2013 . Actualizado a las 22:02 h.

La Asamblea de la República portuguesa ha aprobado este martes los presupuestos del 2014, marcados por la austeridad y por los recortes a pensionistas y funcionarios, en una nueva jornada de protestas en la calle que se ha trasladado también al interior del hemiciclo, donde han llegado a escucharse gritos de «dimisión». La oposición de izquierda ha votado en bloque contra las cuentas públicas del próximo año, respaldadas únicamente por las dos formaciones que comparten el Gobierno, el Partido Social Demócrata (PSD) y Centro Demócratico Social (CDS). Un diputado de la CDS por Madeira, Rui Barreto, se ha desmarcado de la postura oficial y ha votado 'no'.

Entre las medidas previstas se incluye un recorte del sueldo de los funcionarios que ganen más de 675 euros y de las pensiones superiores a los 600 euros mensuales. La oposición, que presentó 375 enmiendas a la ley, ha anunciado que recurrirá ante el Constitucional estos Presupuestos si el presidente de la República, Anibal Cavaco Silva, decide finalmente no pedir la opinión del alto tribunal. La ministra de Finanzas, Maria Luís Albuquerque, ha definido los Presupuestos de 2014 como un mal menor para la economía portuguesa, que quiere evitar un segundo rescate. A seis meses de que concluya el «programa de ajuste» impulsado por la 'troika', Albuquerque ha defendido que el país encara «un futuro más prometedor».

El discurso de la ministra ha sido interrumpido desde la tribuna de invitados por gritos de «dimisión, dimisión», una consigna que también se ha escuchado en la calle. Miles de personas han secundado el llamamiento de los sindicatos y se han manifestado en Lisboa y en otras ciudades para protestar contra el Gobierno, al que acusan de adoptar medidas «injustas» contra la clase media y baja y de favorecer «siempre a los mismos», según algunos de los mensajes recogidos por los medios locales. Las concentraciones, que han tenido como epicentro la plaza junto a la Asamblea de la República, se han extendido también a las entradas de algunos ministerios.