Arafat fue envenenado con polonio

Europa Press

INTERNACIONAL

La viúda del expresidente palestino ha recibido este miércoles el resultado de las pruebas realizadas por forenses suizos a los restos de su marido

06 nov 2013 . Actualizado a las 23:42 h.

El expresidente palestino Yaser Arafat fue envenenado hasta morir en el 2004 con polonio radiactivo, ha señalado este miércoles su viuda, Suha, después de recibir los resultados de las pruebas realizadas por forenses suizos a los restos de su marido.

«Estamos revelando un verdadero crimen, un asesinato político», ha declarado a Reuters en París, tras recibir el informe del Instituto de Radiación Física del Hospital Universitario de Lausana sobre las muestras tomadas en la tumba de Arafat en Ramala, Cisjordania, cuando el mausoleo fue abierto el pasado noviembre.

Los forenses suizos han encontrado un nivel letal de polonio-210 en su cuerpo, ha informado la cadena de televisión Al Yazira. Eso confirmaría los hallazgos de una investigación realizada por la cadena qatarí el año pasado que detectó restos del isótopo en los efectos personales de Arafat.

Una telenovela, según Israel

Israel ha calificado de «telenovela» la investigación, realizada por tres países, para descifrar las causas de la muerte del histórico líder palestino Yaser Arafat, y que apuntan al envenenamiento por elevados niveles de polonio 210. «Esto no tiene nada que ver con Israel, ni tiene la más mínima credibilidad. Es otro episodio en la interminable telenovela entre Suha Arafat y la Autoridad (Nacional) Palestina», dijo a Efe el portavoz de Exteriores, Igal Palmor. Añadió que la base científica de la investigación está llena de «agujeros», porque no han investigado los lugares donde estuvo Arafat antes de morir en busca de trazas radiactivas ni se ha querido interrogar a los médicos que le rodearon en su lecho de muerte en el hospital Percy de París, donde murió en el 2004.

Además, Palmor señaló que recientemente el laboratorio ruso que llevaba a cabo la tercera de las investigaciones -junto con la de Suiza y la de Francia- anunció que no encontró restos de radiactividad, para desdecirse poco después. «La teoría del posible envenenamiento tiene más agujeros que sustancia», sentenció Palmor, para quien tampoco se han realizado pruebas sobre una posible «contaminación colateral».