Los socialistas se imponen en las municipales portuguesas

redacción / la voz

INTERNACIONAL

El independiente Rui Moreira será el nuevo regidor de Oporto y António Costa repetirá como alcalde de Lisboa

30 sep 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

El gobernante Partido Social Demócrata (PSD, de centroderecha) perdió su bastión de Oporto y los socialistas ganaron por mayoría absoluta en Lisboa, según las proyecciones de voto de las elecciones municipales celebradas ayer en Portugal.

En los comicios, destinados a escoger 308 alcaldías, el actual alcalde de Lisboa, el socialista António Costa, logró su tercer mandato en la capital con más del 50 % de los votos, mientras que en Oporto el ganador fue el independiente Rui Moreira, por delante de Luís Filipe Menezes (PSD) y Manuel Pizarro (PS).

Los socialistas vencieron en el cómputo general de votos, según los datos provisionales, pendiente del recuento definitivo. La abstención, que se situó en cerca del 40 %, fue superior a la del 2009 y atribuida al desencanto de los portugueses con los partidos políticos y al discreto seguimiento de la campaña por parte de las televisiones lusas.

El PSD y el PS, los grandes partidos que se han alternado en el poder desde 1974, midieron fuerzas por primera vez desde las legislativas anticipadas de junio del 2011, un mes después de que Portugal firmase un rescate internacional.

El proceso electoral transcurrió con normalidad y solo se registraron esporádicos actos de boicot en algunos colegios electorales por la reorganización administrativa que dicta la supresión de cerca de 1.000 juntas de distrito. Las elecciones¡ tuvieron lugar en pleno examen por parte de la troika de las medidas de ajuste y se consideraban un test para la política de austeridad del Gobierno de Pedro Passos Coelho.

Los analistas ya preveían que electores castigarían en las urnas al centroderecha por las medidas de austeridad puestas en marcha desde que el país se beneficiara de un plan de ayuda internacional acordado en el 2011.

Voto de castigo

A falta de conocer el cómputo total de los resultados, efectivamente hubo voto de castigo al partido gobernante, que se hizo notar especialmente en Oporto, la segunda ciudad del país, con la victoria del candidato independiente frente al del PSD.

Era la primera vez que los portugueses acudían a las urnas desde que el país recibió un plan de rescate internacional de 78.000 millones de euros, acordado en mayo del 2011 por la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional, a cambio de que el Gobierno aplicara estrictas medidas de austeridad.

El plan de recortes ha hundido el país en la recesión, con un desempleo récord, y ha levantado una ola de protestas. El Tribunal Constitucional ha anulado varias medidas de austeridad del Gobierno, la última el jueves, en plena campaña electoral, lo que pone en peligro la aplicación del plan de rescate.

En las anteriores elecciones municipales de octubre del 2009, el PS terminó primero en número de votos, pero el PSD se impuso en la mayoría de las alcaldías, con 139 municipalidades frente a 132 para los socialistas. Estas elecciones estuvieron marcadas por la notable presencia de candidatos independientes.