España insta a la ONU a promover sanciones contra Siria

EFE

INTERNACIONAL

El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, apuesta por una resolución «vinculante» si no se produce el desarme químico

18 sep 2013 . Actualizado a las 18:11 h.

El ministro español de Exteriores, José Manuel García Margallo, se pronunció hoy por una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU sobre Siria que sea «vinculante» y «prevea consecuencias», si el régimen de Bachar al Asad no acata las reglas que se le impongan para su desarme químico.

García Margallo, quien compareció en París ante la prensa junto a su homólogo francés, Laurent Fabius, que lo había recibido para un almuerzo de trabajo, señaló que esa resolución tiene que adoptarse «lo más pronto posible».

Insistió en que el Gobierno español quiere que sea «una decisión jurídicamente vinculante, es decir, que prevea consecuencias en el supuesto de que haya un incumplimiento por parte del régimen de Asad» porque otra cosa «dañaría enormemente la credibilidad del Consejo de Seguridad».

Explicó que, una vez que los inspectores de la ONU han dado a conocer su informe, «es obvio que se han utilizado armas químicas y todo apunta a que esas armas químicas han sido utilizadas por el régimen de Bachar al Asad».

«Un crimen de este tipo no puede quedar sin respuesta»

Y recordó que, desde el principio de la crisis, Madrid hizo hincapié en que el uso de armas químicas era «cualitativamente distinto» del recurso a las convencionales y en que «un crimen de este tipo no podía quedar sin respuesta por parte de la comunidad internacional».

También puntualizó que no se había pronunciado en detalle hasta ahora porque «como gobierno deseábamos que se esperase a las evidencias recogidas por Naciones Unidas».

El objetivo de la resolución -según García Margallo- es impedir que esas armas químicas se vuelvan a utilizar, que se entreguen y se destruyan, «sin necesidad de intervención militar».

Pese a todo, dio por hecho que «la guerra continuará por desgracia, con un coste humano que es inabordable», y afirmó que «debe haber una solución política» y, para eso, hay que hacer un esfuerzo para que el régimen y la oposición se sienten a negociar.

Fabius indicó que Francia tiene «la misma voluntad de encontrar una solución política en Siria» y reiteró la intención de París de que la resolución de la ONU contemple la amenaza de sanciones para las autoridades de Damasco, si no respeta las reglas que se le impongan para el desarme de su arsenal químico.

Sospechosa actitud rusa

«Nadie entendería (...) que haya disposiciones que impidan su aplicación», subrayó el ministro francés, después de quejarse de la posición rusa contraria a que el texto haga referencia al conocido como el capítulo séptimo, es decir, a sanciones para garantizar su cumplimiento.

Fabius dijo que le «sorprende mucho la actitud rusa» que «cuestiona la objetividad de los inspectores» de la ONU, cuando su informe «es apabullante» al demostrar que hubo «una masacre química».

«Ese informe no se puede cuestionar seriamente», opinó el jefe de la diplomacia francesa, quien hizo hincapié en que el compromiso sobre Siria entre rusos y estadounidenses de la semana pasada para el desmantelamiento de las armas químicas «por ahora es un papel» y resulta «indispensable que se traduzca en hechos» y «se aplique». EFE