Tony Abbott, de seminarista a primer ministro australiano

EFE

INTERNACIONAL

«Quiero encabezar un Gobierno que dice lo que piensa y que hace lo que dice que va a hacer, no uno que habla demasiado»

07 sep 2013 . Actualizado a las 15:50 h.

El político conservador Tony Abbott, quien durante su juventud llegó a ser seminarista, boxeador y periodista antes de presentarse como candidato de la Coalición Liberal a los comicios generales celebrados este sábado en Australia, será el futuro líder del Ejecutivo.

Según los datos preliminares de la Comisión Electoral Australiana, el grupo conservador logrará de manera cómoda más de los 76 escaños de la Cámara Baja, formada por 150 asientos, necesarios para gobernar en solitario.

Abbott, calificado como un político pragmático y combativo que condena el aborto, las relaciones prematrimoniales y niega el cambio climático, prometió durante su campaña formar un Ejecutivo veraz en contra del que han ofrecido, según él, los laboristas.

«Quiero encabezar un Gobierno que dice lo que piensa y que hace lo que dice que va a hacer, no uno que habla demasiado y hace muy poco, y cuando por fin actúa es para dañar la población», dijo Abbott durante el segundo debate televisado que mantuvo con el primer ministro del país, el laborista Kevin Rudd.

Según adelantó el líder conservador, una de sus primeras órdenes en el Gobierno serán derogar los impuestos del laborismo contra las emisiones de dióxido de carbono y las compañías de alquiler de vehículos.

La Coalición Liberal reemplazará el actual plan para crear una red nacional de banda ancha por uno más coherente, según ellos, que contempla una inversión de 29.500 millones de dólares australianos (unos 26.900 millones de dólares o 19.682 millones de euros).

Abbott ha prometido además a una población de 22 millones de habitantes la creación de dos millones de puestos de trabajo en una década y acabar con el déficit de los presupuestos estatales para el final de su mandato de tres años.

Pero de todas las promesas electorales de la coalición conservadora la más popular ha sido las 26 semanas de libranza con el sueldo completo que ha prometido a las madres trabajadoras que tengan un hijo.

Abbott, de 55 años y diputado desde 1994, se declara un admirador del último primer ministro conservador de Australia, John Howard (1996-2007), para quien trabajó durante sus cuatro mandatos y ocupó las carteras de Trabajo (1998-2001) y de Sanidad (2003-2007).

Nació en Londres en 1957 y, cuando tenía tres años, su familia regresó a Australia y se instaló en los suburbios de Sídney, donde le matricularon primero en el centro jesuita de St Aloysius' College y luego en el de St Ignatius' College.

Económicas y Derecho

De ahí pasó a la Universidad de Sídney, donde cursó estudios de Económicas y Derecho.

Con 26 años, ingresó en el Seminario de St Patrick y lo abandonó tres año más tarde sin haberse graduado.

Antes de entrar en política, se casó con su actual esposa y desempeñó varios trabajos, entre ellos periodista para el diario «The Australian» y director de Australianos por una Monarquía Constitucional, una organización contraria a la instalación de un sistema republicano en Australia.

Abbott también se opone firmemente a la investigación científica con células madre, al matrimonio gay, al aborto y al burka, y aunque llegó a pedir a las musulmanas australianas que se abstuviesen de llevarlo ha evitado pronunciarse de manera explícita sobre su prohibición.

Casado con Margaret, tiene tres hijas, Louise, Bridget y Frances, a quienes reveló en 2005 que tenían un hermano fruto de una relación anterior a su matrimonio, cuando él era un joven estudiante de 19 años, y a quien dieron en adopción.

A pesar de que muchos australianos se echan las manos a la cabeza cuando piensa en Abbott al frente del Gobierno por sus comentarios sexistas o como cuando se le antojó pasear en un minúsculo bañador rojo que acabó subastado en internet, confirmó los pronósticos de las encuentras al sumar mayoría de votos.