Mugabe es investido presidente de Zimbabue por séptima vez

Efe

INTERNACIONAL

Unos 60.000 opositores han intentado boicotear el acto del líder más longevo de África

22 ago 2013 . Actualizado a las 20:59 h.

El presidente electo de Zimbabue, Robert Mugabe, ha jurado hoy su cargo en un acto boicoteado por la oposición que reunió a unas 60.000 personas en Harare y marcó el inicio del séptimo mandato del líder más longevo de África.

Tras permanecer 33 años en el poder, Mugabe, de 89 años, volverá a dirigir el país durante el próximo lustro, tras su polémica victoria en las elecciones del pasado 31 de julio, que fueron sido tachadas de «fraudulentas» por la oposición.

«Juro obedecer, mantener y defender la Constitución y todas las otras leyes de Zimbabue, que promoveré todo lo que suponga un avance y me opondré a cualquier daño a Zimbabue», agregó en una ceremonia celebrada en el Estadio Nacional de Harare. El mandatario tomó asiento a continuación para firmar su declaración, ante el presidente del Tribunal Supremo, Godfrey Chidyausiku, y entre los vítores de la multitud que abarrotaba el estadio.

Chidyausiku, vestido de rojo y ataviado con peluca, impuso entonces la banda presidencial verde y oro a Mugabe.

Al acto asistieron numerosos líderes africanos, entre ellos el presidente de Mozambique, Armando Guebuza; el de República Democrática del Congo, Joseph Kabila; el de Namibia, Hifikepunye Pohamba; o el primer ministro de Suazilandia, Barnabas Dlamini. En representación de Sudáfrica -gran potencia emergente de África- acudieron el expresidente Thabo Mbeki y el actual vicepresidente, Kgalema Motlanthe, mientras que el presidente sudafricano, Jacob Zuma, se ausentó por una visita de trabajo en Angola.

Zuma, cuyo país lidera la Comunidad para el Desarrollo del África Meridional (SADC, en sus siglas inglesas), ya felicitó a Mugabe por su victoria tras calificar las elecciones de «libres y pacíficas».

La multitudinaria ceremonia se celebró casi un mes después de las polémicas elecciones del pasado 31 de julio, que otorgaron una abrumadora victoria a Mugabe y que fueron impugnadas sin éxito por la oposición.