La expulsión de una refugiada kazaja abre otra crisis en Italia

María Signo ROMA / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

El ministro del Interior, aliado de Berlusconi, sufre una moción de censura

16 jul 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Una oscura operación policial que terminó con la expulsión de la mujer y la hija de un opositor al presidente de Kazajistán, Nursultan Nazarbaev, puede ser el detonante de una crisis del inestable gobierno de Enrico Letta, al estar involucrado en ella el ministro del Interior Angelino Alfano, mano derecha de Silvio Berlusconi. Aunque el primer ministro ha prometido que «quien se haya equivocado, pagará», toda la oposición ha pedido la dimisión del ministro al considerar que es el verdadero responsable de una actuación que va contra los derechos civiles. El Movimiento 5 Estrellas junto con Izquierda, Ecología y Libertad (Sel), ya han presentado en el Parlamento una moción de censura del ministro mientras su partido, el Pueblo de la Libertad (Pdl), ha salido en su defensa dejando claro que «sin él, el gobierno no va adelante».

Los hechos se remontan a finales de mayo cuando, en la medianoche del día 28, la policía hizo irrupción en una casa situada en una zona residencial a las afueras de Roma para detener al opositor kazajo Kukhtar Ablyazov, que goza de asilo político en Inglaterra. No encontrándolo, la policía retuvo a su mujer Alma Shalabayeva, y a su hija Alua de 6 años. Ambas fueron expulsadas de Italia por el procedimiento de urgencia y enviadas a su país a bordo de un avión privado fletado por el gobierno de Kazajistán. Ablyazov denunció los hechos días después.

Las preguntas que la prensa italiana se hace son muchas ya que se sabe que unos días antes funcionarios de la embajada kazaja se habían entrevistado con Giuseppe Procaccini, jefe de gabinete de Alfano, que a su vez dice no saber nada del asunto. Rápidamente se puso en marcha una operación policial para «detener a un peligroso fugitivo», en la que tomaron parte el jefe de la policía móvil Renato Cortese, y el Questore de Roma, Fulvio Della Rocca. La rapidez de la expulsión, el uso de un avión privado y la comunicación al Ministerio de Exteriores solo del nombre de soltera Shalabayeva, sin hacer mención a su matrimonio, son algunos de los puntos oscuros.

Ayer un periódico de Cerdeña, donde estos días pasa sus vacaciones el presidente de Kazajistán, Nursultan Nazarbaev, aseguraba que este se reunió secretamente con Berlusconi el pasado 6 de julio. Fuentes cercanas a Il Cavaliere han desmentido dicha reunión. Lo que sí es cierto es que los dos son grandes amigos desde hace varios años.

Aunque el Gobierno italiano ha revocado la orden de expulsión, Alma Shalabayeva y su hija se encuentran en arresto domiciliario en su país de origen por lo que difícilmente podrán salir de allí de nuevo.